Presunto autor de la peregrina Denise Pikka custodiado por la Policía

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RESPONSABLE DE LA INVESTIGACIÓN

Una inspectora de Policía dice que no habrían hallado el cuerpo de la peregrina sin la colaboración del detenido

Para la inspectora también es relevante la investigación bancaria que se realiza sobre el acusado, ya que en septiembre se descubre que había hecho el cambio de dólares a finales de abril. Asimismo, en el momento en que la policía registra el domicilio de Muñoz Blas se encontró un zulo en el que apareció una elevada cantidad de dinero.

La Inspectora Jefe de la Policía Nacional en Astorga ha advertido de que sin la colaboración de Miguel Ángel Muñoz Blas, presunto asesino de la norteamericana Denise Pikka, no se haría podido localizar el cadáver de la peregrina. Así de categórica se ha mostrado la testigo cuyo interrogatorio ha abierto la tercera sesión del juicio con jurado por el asesinato de la peregrina que se celebra en la Audiencia de León.

La policía, responsable de la investigación desde que se inició el procedimiento y hasta la detención del presunto autor, ha confirmado el nerviosismo del acusado, Miguel Angel Muñoz, cuando se le preguntó sobre el suceso y aseguró no tener conocimiento de nada, a lo que ha añadido la sospechosa llamada telefónica que éste realizó en su día con una duración superior a lo normal, "por lo que se sospecha que fuera con un familiar cercano para descargar una situación de tensión".

Para la inspectora también es relevante la investigación bancaria que se realiza sobre el acusado, ya que en septiembre se descubre que había hecho el cambio de dólares a finales de abril. Asimismo, en el momento en que la policía registra el domicilio de Muñoz Blas se encontró un zulo en el que apareció una elevada cantidad de dinero, una camiseta y unos auriculares quemados.

Preguntada sobre las denuncias de otras dos peregrinas extranjeras en el año 2014, la agente explica que la primera de ellas, de nacionalidad alemana, aseguró que los hechos se habían producido en las cercanías de su vivienda, en cuya entrada se encuentran las gafas de la víctima, si bien no le pudo identificar al ir encapuchado pero la descripción física es coincidente con la del presunto asesino. El hecho de que personas le habían visto hostigar a otras peregrinas, la utilización de una ropa diferente a la normal y el cambio de divisas son "pruebas para determinar que Miguel Angel Muñoz Blas podría ser el asesino de Denise Pikka".

Otro policía, que participó en la reconstrucción del crimen, ha señalado que Miguel Ángel Muñoz Blas confesó voluntariamente los hechos y explicó con detalle cómo la había matado. "Calma, calma, que ya os llevo yo", ha asegurado el agente que les dijo el acusado cuando le preguntaron por alguna cuestión relativa a la muerte de la peregrina cuando reconstruyeron el crimen en presencia de la jueza. Según ha explicado, Muñoz Blas les indicó "con precisión" donde había enterrado inicialmente el cadáver y el lugar al que lo trasladó con posterioridad ante el temor al que fuera hallado debido a las numerosas batidas que las fuerzas y cuerpos de Seguridad del Estado hacían por la zona.

También ha señalado que admitió que había cortado las manos a la estadounidense para borrar pruebas y que las había enterrado. "En el caso de las manos no fue tan preciso como con el cadáver y acotó una zona muy amplia, y aunque se trataron de localizar no ha sido posible", ha señalado el agente, que ha considerado que posiblemente el acusado sabe donde las enterró. Otro agente de la Policía Nacional que ha testificado esta mañana ha declarado que la detención del acusado se llevó a cabo con todas las garantías en relación al recurso planteado por su defensa, que llegó a solicitar la nulidad del proceso por irregularidades.

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