Galicia

Una familia de Vigo recupera su casa tras ser 'okupada': "La mierda que hay es espantosa"

"¿Cómo es posible que hayan ensuciado tanto en dos meses?", es la pregunta que se hace Consuelo al entrar en la casa de su suegra en Vigo y encontrarse un ambiente nauseabundo. Aseguran que no se puede estar sin mascarilla.

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Consuelo Lago, una vecina de Vigo, no da crédito a lo que se ha encontrado en la casa de su suegra tras recuperarla de una 'okupación': "¿Cómo es posible que hayan ensuciado tanto en dos meses?" exclama.

Y no es para menos. Nos enseña en primer lugar la habitación principal de la casa. "Hay comida de perro, un quemazón en el suelo… La mierda que hay es espantosa. No cogieron nunca un pañito para limpiar” explica Consuelo. Junto a eso se ha encontrado varios objetos tirados por el suelo y cigarrillos en las mesillas de noche: “Las sábanas están negras" dice.

Los desperfectos también son visibles en el salón: "Lo convirtieron en una cocina, han traído un microondas. Las paredes están salpicadas de grasa",. En el mueble que preside el salón se puede ver además una sartén usada y numerosos platos y vasos usados. “Tengo que estar con mascarilla, sino es imposible entrar al salón” puntualiza.

La policía se presentó en la mañana del viernes con una orden judicial para que estos "inquilinos" abandonaran el inmueble. Así pues, los propietarios han conseguido recuperar su casa después de dos meses de litigio y optando por seguir todos los pasos legales.

Tenían todo el día la luz encendida

El calvario comenzó en el mes de septiembre cuando una serie de personas 'okuparon' la casa que hasta el momento de su fallecimiento era de la suegra de Consuelo y que posteriormente heredaron su marido y el hermano de éste.

Se dieron cuenta del problema cuando los vecinos de la zona del Camiño da Cacharela llamaron a los dueños preguntando si habían vendido la casa, ya que había movimiento dentro de ella. Intentaron hablar con ellos, pero les dijeron que eran “okupas y que ahora esa casa era de ellos”.

Durante todo este tiempo han tenido que hacer frente a las facturas: "Tienen todo el día la luz encendida y el grifo de agua corriendo para así saber si se la cortamos" denunciaba Consuelo.

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