Hippies

La Familia Arcoíris seguirá en Cádiz: "Ni hacemos sexo desenfrenado ni somos hippies que venimos a hacer daño"

Hace dos años este grupo de okupas se asentó durante un mes en La Rioja. Ahora lo hacen en la sierra gaditana, done permanecerán hasta el fin del ciclo de la luna nueva

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La Familia Arcoíris ha instalado su campamento en Benaocaz, un pueblo de Cádiz. Allí llevan desde el sábado y allí seguirán porque dicen que no piensan irse hasta que haya "luna nueva". Lo cierto es que el ciclo lunar, que comenzó el 19 de mayo, terminará el próximo 17 de junio, por lo que se prevé que la acampada permanezca en la sierra gaditana hasta esa fecha y después se traslade a otra zona.

Al parecer, a su llegada el grupo solicitó permiso para ubicarse en la zona durante un mes. Sin embargo, los vecinos de Benaocaz reconocen que es "totalmente falso" y que nadie concedió ningún permiso.

La Guardia Civil también ha confirmado que el asentamiento es ilegal, ya que "se está acampando, se está haciendo fuego y se están vertiendo residuos", pero de momento los okupas no han sido desalojados.

Otros asentamientos en La Rioja y Oviedo

Hace varios meses la Familia Arcoíris también se instaló en zonas de La Rioja y de Oviedo. Defienden que no hacen daño a nadie y que sólo quieren disfrutar de la naturaleza y organizar actividades educativas. "Hacemos talleres, hay artesanos que enseñan a otros artesanos y tocamos música. Hacemos cosas que nos llama el corazón, no hay ninguna maldad. Es un lugar donde nadie te va a juzgar", explica Juan, el portavoz del grupo.

Para ellos lo más importante es regirse "por las normas de la naturaleza" y prohíben el paso a periodistas y curiosos durante el tiempo que permanezcan acampados en la zona. "No va a poder subir nadie y pediré ayuda a la Guardia Civil incluso. Si las cámaras llegan al lugar van a generar algo que nadie va a poder manejar", advierte Juan.

El propio portavoz también desmiente que se estén llevando a cabo conductas incívicas. "Ni estamos haciendo sexo desenfrenado ni somos unos hippies que venimos aquí a hacer daño", asegura.

Por el momento hay medio centenar de estos seguidores de la Luna, pero en los próximos días llegarán más. "Somos una profecía", insisten.

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