La Muralla de Ávila

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CONSECUENCIAS DEL AGUACERO EN EL CENTRO DE LA PENÍNSULA

Dos tramos de la muralla de Ávila, apuntalados tras los desprendimientos por las fuertes lluvias

Dos arcos de esta estructura medieval, el del Alcázar y el de San Vicente, han sido intervenidos para evitar más incidentes.

Las fuertes lluvias han obligado a apuntalar el interior de uno de los huecos del Arco del Alcázar, situado en el lienzo este de la muralla de Ávila, y a intervenir en el de San Vicente, situado a unos 300 metros, por desprendimientos de pequeños fragmentos de mortero.

Según ha informado hoy en nota de prensa el Consistorio de la capital, la primera actuación se produjo en torno a las 22.45 horas, cuando los técnicos municipales y los bomberos inspeccionaron el interior del Arco del Alcázar, situado en la Plaza de Santa Teresa.

Tras dicha inspección, se apuntaló el interior de uno de los huecos del arco con maderas, en el punto en el que "se pudo dar el desprendimiento" de pequeños fragmentos del mortero que une las piedras.

El arco ya se encuentra abierto al tránsito peatonal. Además, técnicos municipales, bomberos y agentes de la policía local de Ávila intervienen en el Arco de San Vicente, situado en el mismo lienzo este del principal monumento abulense y a unos 300 metros del anterior.

El Consistorio ha precisado que se han registrado desprendimientos de pequeños fragmentos de mortero, y también que se ha tenido que cortar el tráfico, que se restablecerá cuando concluyan las labores de emergencia.

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