Las Palmas de Gran Canaria

Detenida una mujer que agredió sexualmente a su expareja y mordió a los policías que la detuvieron

La Policía Nacional ha detenido en Ciudad del Campo, en Las Palmas de Gran Canaria, a una mujer por un presunto delito de violencia doméstica, agresión sexual, daños y atentados a agentes de la autoridad.

Imagen de archivo de un coche de la Policía Nacional

Imagen de archivo de un coche de la Policía NacionalEuropa Press

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La Policía Nacional ha detenido en Ciudad del Campo, en Las Palmas de Gran Canaria, a una mujer por un presunto delito de violencia doméstica, agresión sexual, daños y atentados a agentes de la autoridad. Fueron los propios vecinos quienes, alertados al escuchar gritos de auxilio que provenían del interior de un domicilio, avisaron a las autoridades.

Cuando los agentes del cuerpo nacional llegaron, observaron a través de una ventana cómo una mujer joven, de 26 años de edad, tenía inmovilizada a otra, mediante la técnica del 'mataleón' y la agredía sexualmente. Ante los hechos, los agentes no lo dudaron e inmediatamente entraron en el domicilio para intentar controlar la situación.

Cuando esta mujer, de nacionalidad marroquí, se percató de la presencia de los policías, les atacó, propinándoles varias patadas e, incluso, llegando al punto de morder a uno de los agentes en el brazo.

Cuando los efectivos policiales lograron controlarla y estabilizarla, la detuvieron. Fue trasladada a la Jefatura Superior de Policía de Canarias, no sin incidentes. Durante su traslado, la agresora atentó contra los medios materiales del interior, produciendo graves desperfectos.

La víctima fue ingresada en un centro médico de la capital, donde se le asistió por diversas lesiones en varias partes de su cuerpo. La Policía ha podido corroborar que la agresora era expareja de la víctima y se había valido de ello para entrar en su domicilio y forzarla.

¿Qué es la técnica del mataleón?

Se trata de una técnica que cada vez es más frecuentada por los delincuentes, quienes sorprenden a sus víctimas por la espalda al pasarles el brazo por el cuello y dejarles enganchados. De esta forma pueden inmovilizarlos e, incluso, dejarles sin conocimiento, debido al estado de inconsciencia en el que les dejan por la falta de aire.

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