La Policía Nacional y los Mossos d´Esquadra han desarticulado a un grupo organizado de falsos policías que asaltaba a turistas en carreteras de Barcelona.
Los arrestados utilizaban utilizaban placas de policía y cartones con supuestos distintivos policiales para parar a los turistas y que, con el pretexto de un registro del vehículo y de sus pertenencias, se apoderaban de dinero y otros objetos de valor con gran rapidez.
Con el pretexto de un registro del vehículo o las pertenencias de los turistas se apoderaban del dinero y de los objetos de valor que portaban, todo ello en menos de un minuto, para después huir a gran velocidad. La policía sospecha que esta banda podía obtener diariamente un botín de entre 6.000 y 10.000 euros.
Para ejecutar los asaltos, los detenidos actuaban en grupos de un mínimo de nueve personas y circulaban con varios vehículos en convoy. Utilizaban automóviles de segunda mano y gama media pero muy potentes, con los que circulaban por vías rápidas a gran velocidad con tres o cuatro miembros de la banda a bordo. Uno de estos vehículos realizaba tareas de contravigilancia y alertaba de la presencia policial al resto, al tiempo que seleccionaba a las potenciales víctimas.
Para evitar ser identificados los adquirían, con documentos falsos, a nombre de personas de nacionalidad española que no tenía ninguna relación con la organización. Con el fin de confundir más a las víctimas vestían además ropas con banderas españolas. En caso de abordar a los turistas cuando caminaban por la calle, les solicitaban la documentación con la excusa que estaban buscando sustancias estupefacientes. Además, si se resistían o intentaban recuperar sus pertenencias, los detenidos no dudaban en agredirles.
En los registros realizados se intervinieron 30.000 euros en efectivo, 7.300 dólares, 350 libras esterlinas, credenciales policiales falsas, prendas de ropa con la bandera española que utilizaban para cometer los robos y documentaciones falsificadas, así como joyas y relojes de lujo valorados en unos 65.000 euros.