Suceso

Denuncian la muerte de una mujer por falta de asistencia en el hospital de Castellón

La familia solicita la apertura de un expediente por responsabilidad patrimonial para conocer los tratamientos aplicados. La mujer falleció tras estar ocho horas en Urgencias, en el hospital de Castellón.

Imagen de archivo del Hospital General de Castellón

Imagen de archivo del Hospital General de CastellónWikipedia

Publicidad

La familia de Sandra Galera, de 36 años, ha tomado la determinación de emprender acciones legales contra el Hospital General de Castellón por falta de asistencia. Los hechos ocurrieron en octubre de 2022, cuando la mujer, madre de dos niñas, falleció tras estar ocho horas en Urgencias con dolor en el pecho y sensación de asfixia.

Su marido pidió una ambulancia tras varias horas con dolor en el pecho, según recoge 'Caso Abierto'. Pero una doctora le dijo que no podían enviarla debido a que "estaban para casos más urgentes" y le indicó que le diera un diazepam.

El dolor continuó y a la mañana siguiente, sus familiares decidieron volver a llamar al 112 para pedir una ambulancia de nuevo. La familia denuncia que no se atendió dicha petición y que les indicaron que debían contactar con su centro de salud, sin obtener respuesta hasta en siete ocasiones. La "terribles dolores" que sufría obligaron a que tuvieran que ponerla en una silla de escritorio para llevarla en su coche particular hasta Urgencias.

A su llegada al hospital, pasaron por triaje y por una sala de espera, donde le dieron diazepam. La madre sostiene que pasaron cuatro horas hasta que auscultaron a su hija. "Me dijeron que vendrían a hacerle una analítica, pero no vino nadie. De repente, la máquina a la que la habían conectado empezó a pitar y en la pantalla ponía: infarto", explica.

Horas más tarde, cambiaron a la mujer de box y un médico comentó con su madre que le harían un electro y una analítica. La familia sostiene que desde esa charla tardaron en realizarle las pruebas.

Sufrió un infarto

Al final, la madre pidió que le pusieran oxígeno porque tenía problemas para respirar desde hacía horas, pero le explicaron que debía autorizarlo la doctora. Seguidamente le pincharon por vía intramuscular y comenzó a respirar de forma "extraña", por lo que salió en busca de ayuda.

Los sanitarios cogieron un desfibrilador al verla e intentaron reanimarla, recuperándola en dos ocasiones aunque sin éxito. El fallecimiento de la mujer se consideró judicial y se le hizo la autopsia, donde se habla de "miocarditis aguda por infección por coronavirus con lesión miocárdica terminal".

La familia asegura que estaba vacunada contra el virus y que nunca tuvo diagnóstico de covid. Solicitan la apertura de un expediente por responsabilidad patrimonial y piden al hospital información sobre el personal que atendió a la fallecida y los tratamientos aplicados.

Publicidad