Atentados de Barcelona

Condenados con penas de hasta 53 años de cárcel los acusados por los atentados de Barcelona

La Audiencia Nacional les condena por organización terrorista y tenencia de explosivos, pero les absuelve por los homicidios.

Publicidad

La Audiencia Nacional ha dictado sentencia sobre los acusados de los atentados que el 17 de agosto de 2017 acabaron con la vida de 16 personas en Barcelona y Cambrils. Los jueces han decidido condenar a Mohamed Houli Chemlal a 53 años y medio de prisión, a Driss Oukabir a 46 años y medio y a Said ben Iazza a ocho años por colaborar con los miembros del grupo terrorista que fallecieron en Alcanar o posteriormente abatidos por los Mossos d'Esquadra.

Los magistrados de la Sección Tercera declaran culpables a Mohamed Houli Chemlal y Driss Oukabir por delitos de pertenencia a organización terrorista, tenencia, depósito así como fabricación de sustancia o aparatos explosivos e inflamables de carácter terrorista y estragos en tentativa de carácter terrorista en concurso con 29 delitos de lesiones por imprudencia grave.

No se les condena por homicidio

La Sala sin embargo ha rechazado considerar a ambos coautores de los atentados de Barcelona de 14 delitos de homicidio en tentativa de carácter terrorista, así como de 34 delitos de lesiones de carácter terrorista y de cinco de lesiones por imprudencia como pedían algunas acusaciones, no así la Fiscalía.

A Said Ben Iazza, la Audiencia Nacional le condena a 8 años por el delito de colaboración con organización terrorista y le impone, además, la inhabilitación absoluta y especial, así como y la prohibición de acercarse a Alcanar durante cinco años desde que cumpla la pena de prisión.

El 17 de agosto del año 2017 fue uno de esos días negros en la historia reciente de España. Varios atentados terroristas en Barcelona y Cambrils dejaros 16 muertos y cientos de personas heridas.

Alrededor de las cinco de la tarde de ese día, un individuo irrumpía en Las Ramblas con una furgoneta cometiendo un atropello masivo y provocando el pánico en el centro de Barcelona. Estado Islámico no tardaba en reivindicar el atentado.

Esa misma noche se iba a producir un segundo ataque terrorista, esta vez en Cambrils. Cinco presuntos terroristas se saltaban un control de los Mossos atropellando a varios de ellos. Todos fueron abatidos, pero uno de ellos apuñaló antes a una mujer que terminó falleciendo.