Crisis migratoria

Así es el trágico trayecto que hacen los migrantes que llegan a Canarias: "Este es el drama de huir de un país"

Raúl García, redactor de 'Espejo Público', explica desde el puerto de La Restinga en El Hierro cómo son los cayucos a los que se suben los migrantes cuando parten desde las costas africanas.

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Canarias está viviendo una auténtica oleada migratoria. Solo en los primeros 15 días de octubre 8.561 personas han arribado al archipiélago, lo que supone una cifra récord desde el 2006. En todo ese año se calcula que llegaron un total de 31.678 personas a sus costas, mientras que en lo que llevamos de 2023 han sido 23.271 los migrantes desplazados desde el continente africano. Hay una parte de todo esto que preocupa bastante y es la forma en la que estos individuos realizan el durotrayecto desde su lugar de origen. Raúl García, redactor de 'Espejo Público', cuenta desde el municipio costero de La Restinga lo duro que es viajar en los cayucos donde son transportados. "Es la imagen, es el drama de huir de un país", asegura.

"Son auténticos cascarones"

"Los vecinos y las autoridades de La Restinga, en la isla de El Hierro, nos decían que cada día llegaban en torno a 400 personas hasta su isla. Nos costaba creerlo hasta que hemos visto esta imagen", dice el reportero señalando seis cayucos amarrados al puerto de la localidad canaria. "Y estamos hablando de una isla que no supera los 10.000 habitantes, aunque tenga cerca de 11.000 censados", continúa.

Las embarcaciones están muchas veces al límite de su capacidad. En ellas suelen encontrarse hasta "270 personas" en unas condiciones infrahumanas. "Son auténticos cascarones", dice Raúl García. El periodista ha visto como en un solo día han arribado hasta el puerto de La Restinga cuatro cayucos. Todos ellos, cargados de migrantes que se encuentran a la deriva durante aproximadamente 7 días.

Tanto niños como adultos se suben a la embarcación y allí permanecen sentados "en la parte de arriba y en la de abajo". "Nos decían algunos de los trabajadores del puerto, los que se dedican a desguazar estas embarcaciones, que es muy llamativo por ejemplo ver zapatos de bebé", asegura García.

La ruta canaria es una de las más mortíferas del mundo

Dentro de cada cayuco, los migrantes hacen sus necesidades a diario. Viven con la esperanza de que el futuro les depare algo mejor a cada uno de ellos. Pero el camino está lleno de obstáculos y como en cada oleada migratoria, pueden llegar a producirse fallecimientos en mitad del océano. Según datos de la Organización Internacional para las Migraciones, en 2022 murieron 1.172 personas en las principales rutas escogidas por los migrantes para llegar a nuestro país desde África. De este cómputo, 561 perdieron la vida en la vía canaria. Junto a la del Mediterráneo, se configura como una de las rutas más mortíferas del mundo.

"El olor es indescriptible porque además de todo ese combustible que se derrama en el casco también están todos los objetos que llevan allí días", señala el periodista mostrando el cayuco en donde hacen el trayecto.

Construidos con el vaciado de un tronco de un árbol, la embarcación ha conseguido adquirir mayor velocidad con el paso de los años, lo cual agiliza el viaje en el que es frecuente que existan migrantes totalmente deshidratados y con quemaduras de sol. Están totalmente hacinados, sobre todo los que permanecen en la parte baja del cayuco. Allí se sientan los que pagan menos dinero por el trayecto, bebés incluidos.

Raúl García muestra varios objetos que están en el interior. Se centra en unos en concreto: "Quiero que vean muy bien cómo son cada una de estas embarcaciones, cómo llevan esos bidones". "Muchos de ellos son gasolina", dice.

La ruta que hacen es bastante dramática. Muchos no planean en ningún momento huir de su lugar de origen. Con el poco dinero que les quedan se suben a la embarcación y se adentran en una odisea que tiene un final: Canarias. Al archipiélago, llegan con mucha emoción pero necesitan asistencia médica nada más desembarcar. Esto se debe a los problemas de salud que aparecen a causa de la deshidratación o la falta de nutrición que no solo pueden aparecer en esa semana en la que viajan. Muchos ya llevan padeciendo este tipo de adversidades desde hace tiempo en los sitios donde vivían.

Desde El Hierro intentan llegar a la Península

¿Qué sucede cuando llegan a El Hierro? García explica que el primer sitio al que van los migrantes cuando llegan a las costas de la isla canaria es un campamento. "En ellos pasan un máximo de 72 horas donde son filiados por la policía", cuenta. Desde aquí son trasladados directamente "en autobús" hasta otro puerto. El objetivo es ahora viajar a Tenerife, sitio en el que "pasan en torno a un mes y desde donde son derivados a la península".

"Es una auténtica crisis migratoria y esta isla está recibiendo cada día cuatro cayucos como estos", concluye el periodista.

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