Unas pruebas rápidas que Alemania lleva realizando desde el incio del contagio en su país, mientras que en España, Castilla La Mancha va a ser la primera comunidad en recibir tests rápidos como los que se usan en el país germano.
En la fábrica donde se producen estos tests rápidos en China, todos los técnicos están protegidos con EPIs. La prueba consiste en añadir una gota de sangre y esperar unos 15 minutos para conocer si se es positivo o negativo en covid-19.
Si después de la disolución aparece una línea, la prueba estará libre de coronavirus y el resultado será negativo. Si por el contrario aparecen dos líneas significará que hay infección por coronavirus y el resultado del test será positivo, pasando a aplicarse todas las medidas de aislamiento previstas para los pacientes de coronavirus.
Esta prueba la podrán realizar los técnicos de laboratotio solamente en una cabina especial. La fábrica china que lo produce es de las pocas empresas que no ha parado durante su cuarentena.
Castilla La Mancha recibirá estos primeros tests a principios de la semana que viene. Otras clínicas privadas y mutuas de trabajadores también los han pedido. En total para toda España llegarán 121.000 tests rápidos, 40.000 menos de los que Alemania puede hacer en una sola semana.
Muchas de estas pruebas se van a realizar al profesional sanitario, ya que, junto con los niños, son los mayores vectores de contagio del covid-19. Según la OMS se trata de la forma más efectiva de salvar vidas, rompiendo la cadena de transmisión y aislando.
