Síntomas calor

Síntomas del golpe de calor que pueden pasar desapercibidos

Son muchas las personas que no prestan atención a algunos síntomas que creen normales o habituales en esta época del año pero que de no tratarse pueden tener consecuencias fatales.

Qué le pasa a nuestro cuerpo con el calor extremo

Qué le pasa a nuestro cuerpo con el calor extremoEFE

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Las elevadas temperaturas de este verano en toda España y gran parte del mundo mantienen en alerta a todas las personas, especialmente a aquellos grupos de riesgo que son más vulnerables al calor extremo. Por eso, hay varias formas de mantenerse hidratado y evitar un golpe de calor, sin embargo, a veces podemos pasar por alto algunos síntomas que pueden llegar a causarnos graves problemas de salud.

Los mareos, dolores de cabeza y fatiga...

Por ejemplo, en esta época del año, como en cualquier otra, se pueden dar los típicos dolores cabeza, fatiga o mareos que muchas personas pueden relacionar con otras patologías. Es posible que así sea pero también es muy probable que tenga que ver directamente con un golpe de calor, y más si se está en la calle a altas temperaturas y sin estar hidratado debidamente.

En la mayoría de los casos un golpe de calor suele producirse cuando el cuerpo se encuentra a una temperatura de 40º o más grados. Ocurre con más frecuencia en los grupos de riesgo como menores de cinco años, personas mayores de 65, embarazadas y enfermos crónicos.

La mayoría de las personas que acuden al médico sufren las consecuencias del calor pero no siempre tiene porque tratarse de un golpe de calor como tal, ya que este se da cuando el cuerpo llega a temperaturas extremas.

Las personas, en la gran parte de los casos, sufre mareos, episodios presincopales sin llegar a la pérdida de conocimiento, bajada de tensión o deshidratación. Síntomas que si no se localizan y se tratan debidamente pueden llegar a causarnos un golpe de calor y en muchos casos la muerte.

¿Qué hacer ante un golpe de calor?

- Llevar a la persona afectada a un sitio fresco o con mayor sombra posible.

- Colocarla en una posición semisentada y con la cabeza levantada para que favorezca la respiración y que, de esta forma, pueda entrar el aire.

- Para reducir la temperatura corporal, hay que quitarle algo de ropa al afectado y refrescarle con paños de agua en el cuello o en la nuca para que recupere la estabilidad.

- Además, debe llevar agua fresca para rehidratar al afectado y hacer que beba en pequeños sorbos ya que, de forma contraria, esto podría empeorar la situación de la persona.

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