Altas temperaturas
El golpe de calor, una emergencia médica severa que puede acabar de forma trágica
Si no se trata, el golpe de calor puede llevar a una pérdida de conciencia, al coma o incluso causar la muerte.
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Un golpe de calor es una emergencia médica grave que ocurre cuando el cuerpo aumenta su temperatura de forma incontrolable, superando los 40 grados centígrados, debido normalmente a la exposición prolongada a las altas temperaturas.
Debido a la crisis climática, cada vez son más habituales los episodios de calor en nuestro país, por lo que es importante conocer sus síntomas y cómo actuar en los primeros momentos, que son cruciales para salvar la vida.
Síntomas del golpe de calor
Se siente la piel caliente y es habitual que se dé "sensación de mareo o sofocos", según explica el Doctor Carlos García Anzardo, de HPS Hospitales, quien insiste en la importancia de actuar con rapidez.
Debemos aplicar "pañitos fríos en las zonas donde están los principales vasos sanguíneos", para refrescar al paciente. Si tenemos hielo lo podemos usar para colocarlo sobre la piel. Trataremos de mover a la persona hacia un lugar fresco y sombreado, o que cuente con aire acondicionado, y además le quitaremos el exceso de ropa.
Una emergencia seria que se cobra vidas
La elevación de la temperatura puede llegar a causar daños en los órganos vitales, como el cerebro o el corazón, los riñones y los músculos, por eso hay que tomarse esta emergencia médica muy en serio y avisar lo antes posible llamando al número de emergencias. En casos severos, un golpe de calor puede ser fatal.
A la espera de la ayuda médica, no se recomienda dejar sola a la persona afectada, siendo importante acompañarla en todo momento hasta que llegue la asistencia médica. Si por teléfono nos dan alguna instrucción, es importante seguirlas hasta que el paciente pueda ser atendido de forma profesional.
En lo que va de verano, se estima que 1.356 personas habrían perdido la vida debido a las altas temperaturas, 366 solo en los 4 primeros días de este mes de agosto, según datos del Instituto de Salud Carlos III.
Prevención y precaución
Como recomendaciones para prevenir un golpe de calor un aspecto esencial es mantenerse hidratado, bebiendo agua con frecuencia y especialmente cuando hace calor o se realiza ejercicio físico. También se aconseja evitar la exposición prolongada al sol y se recomienda buscar sombra en las horas centrales del día, que son las más calurosas.
En verano, para mantenerse fresco, se recomienda el uso de ropa ligera y transpirable, ropa de colores claros y ligera, que permita la transpiración.
La crisis climática está elevando las temperaturas globales, haciendo que el calor extremo sea cada vez más frecuente y peligroso. Junio fue el mes más caluroso jamás registrado y este 2024 podría acabar siendo el más cálido de toda la serie histórica. En este contexto, protegerse del calor y permanecer alerta a las alertas meteorológicas es esencial para adaptarse a este nuevo desafío climático.
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