EE.UU
La venganza de un ciervo, mata a cornadas al cazador que le disparó una flecha
La policía del Estado de Oregón ha notificado que la víctima es un varón de 66 años que cuando trató de recoger el cuerpo del animal después de dispararle no se dio cuenta de que estaba vivo.

Publicidad
Mark David, vecino en la localidad de Hillsboro, en Oregón, solía salir a cazar cada fin de semana. Pero el domingo 30 de agosto no esperaba que fuera su última salida. Este americano de 66 años murió a primera hora en el condado de Tillamook, en Oregón, por las heridas provocadas por un ciervo canadiense.
El cazador, la flecha y el ciervo
Mark David estaba decidido a cazar un buen ejemplar de uapití, wapití o ciervo canadiense. El wapiti tiene una gran cornamenta yademás es considerado una especie cinegética, siendo su carne más baja en grasas y más alta en proteínas.
Los testimonios recogidos por los agentes de la policía de Oregón hablan de una batida organizada en un territorio cercano, en Tillamook, Oregón. Los acompañantes y vecinos de la víctima indican que Mark, experto cazador con arco, participó en la jornada de caza por unos terrenos forestales propiedad de un amigo.
Una de los animales abatidos por Mark fue un ciervo canadiense, también conocido como uapití. Un macho adulto de gran peso. El ciervo recibió el flechazo de Mark pero no pudo ser localizado por que la "noche se echó encima". El cazador decidió buscarlo a la mañana siguiente.
Según han explicado los agente de la Policía de Oregón, a primera hora de la mañana, Mark David acompañado del propietario de la finca localizó al ciervo herido e intentó trasladar el cuerpo del animal hasta su vehículo.
Más Noticias
-
Robin Westman, identificado como el autor del tiroteo en Minneapolis tras encontrarse vídeos publicados en YouTube con un arsenal de armas
-
VÍDEO: El ministro de Transportes turco se graba conduciendo a más de 200 km/h y es multado
-
Alemania impulsa un servicio militar voluntario con opción a hacerlo obligatorio
El ciervo canadiense mal herido le propino varias cornadas al cazador. Fue la reacción natural del animal que Mark David no tenía prevista. El cazador murió a causa de las heridas producidas por las astas del uapití.
Publicidad