Premios 'anti Nobel'
¿Triunfa en la vida la gente con menos talento?, los ganadores del premio 'anti Nobel' aseguran que sí
Los premios 'anti Nobel' se entregan anualmente en EEUU y, a modo de parodia, otorgan un galardón a proyectos entre graciosos y absurdos pero que hacen pensar a la población.
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En los últimos años, los premios 'anti Nobel' de EEUU han ido cogiendo cierto protagonismo a nivel mundial. En ellos, a modo de parodia, se distinguen investigaciones que, en un principio, pueden parecer absurdas para el campo de la ciencia pero que, en el fondo, nos llevan a pensar a muchos de nosotros.
Al igual que en los Nobel, se entrega cada año, y cuenta con diferentes categorías: medicina, biología o historia, entre otros. Su premio: una dotación económica de, ojo, 30 céntimos.
En esta edición, la número 32 que se celebra, algunos de los premios han sido muy comentados en redes sociales. Uno de ellos, el premio IG Nobel de Economía, realizado por un grupo de tres científicos italianos, ha demostrado a través de un modelo matemático que, en gran parte de los casos, las personas que triunfan en la vida o ascienden en algunos puestos no son los más listos, sino aquellos con menos talento personal, los "mediocres".
Este estudio explica que ascender "es cuestión de suerte, más que de ser listo o tonto", desplazando así a un lado la cultura occidental que todavía "cree en la meritocracia", es decir, que la inteligencia (el coeficiente intelectual) y el trabajo perseverante (la constancia y el esfuerzo, sobre todo) contribuirá al éxito de las personas.
Ahora, este grupo de italianos pone sobre la mesa el factor suerte y asegura que todo lo anterior, en la mayoría de casos, no influye, algo que explicaría el porqué muchas personas constantes e inteligentes no consiguen algunos de los logros que otros más "mediocres" sí.
Otros proyectos galardonados
Entre otros de los llamativos proyectos, destaca el ganador del IG Nobel a la Cardiología Aplicada. Asegura que cuando una pareja se conoce y surge la atracción entre ambos, directamente, su ritmo cardiaco se sincroniza.
Por otro lado, el premio de Historia del Arte se lo han llevado unos joviales expertos que afirman que en la civilización maya era frecuente inyectarse alcohol y otras sustancias en el recto para alcanzar un mayor estado de embriaguez.
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