El primer hotel subterráneo del mundo ha sido construido en un pozo abandonado en Shanghai, en el este de China, ha atraído a muchos visitantes a vivir una vida de altura lo más baja posible.
El hotel, situado en las afueras de Shanghai, hace 20 años era una cantera. Una vez agotados los recursos, el lugar se convirtió en un vertedero de residuos. Pero a medida que China aumentaba sus controles de contaminación ambiental, Shanghai decidió construir algo que ni siquiera los mineros podían imaginar.
Construido a casi 100 metros bajo tierra, el Shimao Quarry Hotel es perfecto para una visita de bajo perfil bajo la ciudad más grande de China.
El hotel de lujo de 19 pisos es el rascacielos más bajo del mundo. Con sólo dos pisos sobre el nivel del suelo, la gente paga más de 500 euros por una noche con vistas a un pozo gigante.
Una clienta ha descrito su estancia diciendo que "Se siente muy único cuando se mira por la ventana, la vista no es ni el cielo azul ni el mar, sino un acantilado alto. Siento que es un lugar lleno de historias".
Chen Xiaoxiang, ingeniero jefe de la construcción del hotel, dice que no existe un proyecto similar en ningún lugar del mundo. La instalación de sistemas de ventilación, iluminación, ignífugos y antisísmicos fueron sólo algunos de los primeros desafíos encontrados. También cuenta que "Cada día surgían nuevas dificultades y el costo aumentaba a medida que avanzaba la construcción. Pero nuestro éxito en la resolución de todos los obstáculos ha proporcionado una valiosa experiencia para que otros hagan un mejor uso de las condiciones naturales abandonadas y de los entornos geológicos en todo el mundo".
Ahora la antigua y fea cicatriz se ha convertido en una pionera infraestructura, trayendo una experiencia de lujo tanto a los locales como a los visitantes.
