Jordania

El rey Juan Carlos y la reina Sofía se reencuentran en la boda real en Jordania

El príncipe heredero de Jordania, se da el sí quiero con Rajwa Al-Saif. Al enlace del hijo del rey Abdalá y de la reina Rania han asistido los reyes eméritos Don Juan Carlos y doña Sofía.

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Jordania está de celebración. El príncipe Hussein, heredero al trono, se casa con su novia Rajwa Al- Saif. Rajwa nació en Arabia Saudí y es la hija pequeña de un importante empresario saudí.

Aunque poco se sabe sobre sus comienzos, el príncipe desveló en mayo que se conocieron a través de un amigo. Ambos estudiaron en universidades estadounidenses, aunque separados por más de 600 kilómetros: él se graduó en historia internacional en 2016 por la universidad Georgetown en Washington, y ella, en arquitectura por la universidad de Siracusa, en Nueva York.

Fue en agosto de 2022 cuando la pareja se comprometió y dos meses después, tuvo lugar su primera aparición oficial. Desde entonces, Rajwa ha acudido a la mayoría de eventos familiares. Entre ellos, la boda de la hermana pequeña del príncipe, Iman, que se celebró hace tan solo dos meses y medio.

La boda ha tenido lugar en el Zahran Palace, en la capital, Amman, mismo lugar donde hace 30 años se dieron el sí quiero los Reyes de Jordania: Rania y Abdalá II. Ha sido el hermano menor del novio, el príncipe Hashem, quien ha escoltado a la ahora princesa hasta el altar.

Invitados de excepción

140 invitados de 70 países diferentes acudirán a la ceremonia. Entre los invitados, se encuentran los príncipes de Gales, también los reyes de Dinamarca, Holanda, Suecia y Noruega. Entre los altos cargos internacionales invitados se encuentra Jill Biden, mujer del presidente de Estados Unidos.

El evento ha propiciado el reencuentro entre los reyes eméritos españoles. Juan Carlos y Sofía han acudido juntos al recibimiento con los reyes jordanos. Para una boda de este nivel, 140 invitados pueden parecer pocos, pero posteriormente, los novios y los padres de los recién casados recibirán a más de 1700 invitados en la recepción. En este evento, cantantes locales y regionales, junto con un coro, actuarán para los invitados. Las celebraciones concluirán cuando Hussein y Rajwa corten su tarta de boda.

Las celebraciones tienen un profundo significado para el islam. Pretenden enfatizar la continuidad de su estado árabe, que ha sido admirado por muchos debido a su gran estabilidad. Por otro lado, podría ser una forma de zanjar definitivamente el altercado de 2021 con el príncipe Hamzah bin Husein, hermanastro del actual rey jordano, Abdalá II, por un supuesto intento de golpe de estado.

Se ha declarado fiesta nacional y se han organizado celebraciones y conciertos por todo el país. La royal wedding llega en una época de dificultad económica para el país, con una elevada tasa de desempleo joven. "Claro que es un motivo de alegría. Pero en un par de días volveremos a nuestros problemas", afirmaba un librero de 25 años a la agencia AP. Además, esta boda podría servir para afianzar la alianza con su vecino Arabia Saudí, que podría aliviar esta recesión económica con buenos pactos sobre el petróleo.

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