Queda encajonado entre dos camiones tras un accidente del que sale ileso

Whitby es un padre de 27 años que a punto estuvo de no contarlo. Un espeluznante accidente en la carretera acabó con su coche como una lata de sardinas donde él era el protagonista. Apenas se podía mover, pero al menos salió con vida.

No tuvo más que esperar para que le sacaran del amasijo de hierros. Sí le dio tiempo para posar para la fotografía en Baker City, en Oregón. El diario The Oregonian recoge las declaraciones de uno de los conductores de camión, donde relata que "él iba condiciendo por una pendiente detrás del vehículo por un tiempo, pero retrocedió debido a que la niebla era tan espesa".

Cuando se quiso dar cuenta, "la gran plataforma se extendió a través de los carriles de la autopista, sin dejarle a donde ir". El coche se quedó encajado y Whitby vió que el coche quedó como una armadura.

Whitby reconoce que es un tipo con suerte, "después de todos los golpes y el ruido supe que iba a estar bien", reconoció, "solo me quedó rezar para que vinieran a buscarme cuanto antes". "Desde el accidente disfruto más del tiempo con mi mujer y mi hijo de dos años", concluyó.