Internacional
Un presbítero, amigo de Francisco, tras la publicación de Trump vestido de papa: "Es banal, ridícula e insultante"
"Las teologías del odio y la prosperidad siempre pueden ser más dañinas, cuanto más se acercan a poderes políticos egocéntricos y autoritarios", manifestó Marcelo Figueroa.
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La imagen del presidente estadounidense vestido de papa, generada con Inteligencia Artificial y publicada en sus redes sociales y en las oficiales de la Casa Blanca, ha causado revuelo. Llega tras la muerte de Francisco el 21 de abril y mientras el Vaticano se prepara para buscar su sucesor en un cónclave desde este miércoles.
El presbítero Marcelo Figueroa, amigo personal del papa Francisco y autor de diferentes libros sobre diálogo interreligioso, criticó a Trump por publicar en las redes sociales una imagen vestido de papa y aseguró que le "avergüenza sobremanera la utilización banal, ridícula e insultante" de esa fotografía. "Dice ser presbiteriano protestante como lo soy yo. De mi parte, como tal, me avergüenza sobremanera esta utilización banal, ridícula e insultante para mis hermanos católicos en estos tiempos difíciles y para la figura del papa Francisco", criticó Marcelo Figueroa.
Para este argentino evangélico colaborador del periódico L' Osservatore Romano y que se considera "un protestante en el periódico del papa", resulta difícil de creer "lo tristemente lejos que llegaron esos escritos proféticos", según ha explicado en varios mensajes en sus redes sociales. "Las teologías del odio y la prosperidad siempre pueden ser más dañinas, cuanto más se acercan a poderes políticos egocéntricos y autoritarios", apuntó el presbítero.
En ampliación a sus mensajes en redes sociales, Marcelo Figueroa ha recordado que cuando en el año 2018 escribió con el jesuita Antonio Spadaro en La Civiltá Católica dos artículos ya comprobaron síntomas preocupantes de unión de estos grupos religiosos con poderes políticos. "En ese momento Trump todavía no era presidente, pero se podía percibir en sus discursos de campaña y sus repercusiones en países importantes de Latinoamérica, como Brasil, un crecimiento de esta dinámica de odio y división disfrazada de purismo religioso", ha manifestado.
Más reacciones
También el cardenal estadounidense Timothy Dolan considera que la imagen del presidente Donald Trump vestido de papa "no ha estado bien", según consideró este domingo en Roma, a tres días de que comience el cónclave para elegir nuevo pontífice.
Como diríais en italiano, "ha quedado mal", afirmó el también arzobispo de Nueva York ante los medios, en italiano y sonriendo, al llegar a la iglesia de Nuestra Señora de Guadalupe en Roma para la misa. Agregó: "No ha estado bien".
La Conferencia Católica del estado de Nueva York ha acusado a Trump de burlarse de la fe: "Esta imagen no tiene nada de ingeniosa, ni de divertida, señor presidente. Acabamos de enterrar a nuestro amado papa Francisco y los cardenales están a punto de entrar en un cónclave solemne para elegir al nuevo sucesor de San Pedro. No se burle de nosotros", escribió en X.
En defensa de Trump ha salido su vicepresidente, JD Vance, católico converso, al alegar que la imagen era una broma. El vicepresidente de EE.UU., JD Vance, convertido al catolicismo y quien fue el último funcionario público que atendió el desaparecido papa Francisco, defendió a Trump en una publicación en su cuenta de X al argumentar que la imagen debería ser tomada como una broma.
En Italia el Gobierno de la ultraderechista Girogia Meloni no ha entrado en el debate, aunque la imagen sí ha sido criticada por formaciones de la oposición como el Partido Demócrata o Italia Viva.
Trump vestido de papa
Estas reacciones vienen días después de que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, publicara en su cuenta de la red Truth una imagen suya vestido como papa.
La estampa está hecha con la ayuda de la inteligencia artificial y lo presenta con sotana blanca, mitra, cruz dorada y parece estar por dar una bendición, porque tiene el brazo derecho inclinado a la altura del hombro y el dedo índice levantado.
Una imagen que aparecía mientras la Iglesia católica espera la celebración del cónclave que elegirá al nuevo pontífice tras la muerte del papa Francisco y dos días después de que el mandatario afirmara que él sería una buena opción para ocupar el trono de San Pedro. "Me gustaría ser papa. Esa sería mi opción número uno. Creo que sería un gran papa. Nadie lo haría mejor que yo", publicaba el republicano.
Con esta imagen, el presidente de Estados Unidos ha vuelto a generar controversia, ya que en el funeral del papa Francisco, el pasado sábado en El Vaticano, se saltó el protocolo al asistir vestido de azul y no de negro, como lo dicta la tradición en estos casos.
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