La Asamblea General de la ONU votará el jueves un proyecto de resolución preparado por Arabia Saudí y Catar que condena a la represión que ejerce el Gobierno de Siria y que respalda los planes de transición de la Liga Árabe.
El texto, que condena las violaciones "sistemáticas" de derechos humanos en Siria y exige a Damasco detener "de forma inmediata" los ataques contra la población civil, fue distribuido hoy entre los Estados miembros y se votará en el pleno de la Asamblea el jueves a las 20.00 GMT, según explicaron fuentes diplomáticas.
El voto en la Asamblea General, donde no existe el poder de veto pero cuyas resoluciones son más bien simbólicas al tratarse de un órgano consultivo, se producirá después de que Rusia y China vetaron en el Consejo de Seguridad una resolución de condena a Damasco el pasado 4 de febrero.
Se prevé que el proyecto de resolución sea defendido en el órgano donde están representados todos los miembros de la ONU por Egipto, país que preside el grupo de países árabes en la Asamblea, aunque el texto cuenta con el respaldo de muchas naciones occidentales.
"Queremos lograr el apoyo de todos los Estados miembros", dijo el lunes el embajador egipcio, Maged Abdelfattah Abdelaziz, durante una intervención en la Asamblea en la que la alta comisionada para los Derechos Humanos, Navi Pillay, pidió a la comunidad internacional que actúe "urgentemente" para detener la violencia en Siria.
La resolución llama a un "proceso político sin exclusiones" liderado por los sirios, desarrollado en un ambiente "libre de violencia, intimidación y extremismo", y que permita al pueblo sirio afrontar sus "legítimas aspiraciones".
Aunque no pide de forma expresa la salida del poder del presidente Bachar Al Asad, el texto sí muestra su "total apoyo" a la propuesta de la Liga Árabe de "facilitar" una transición política a partir de un diálogo "serio" entre el régimen y "todo el espectro de la oposición", que termine en un sistema "democrático y plural".