Argentina

Un médico deja estéril a una mujer tras realizarle una ligadura de trompas que nunca solicitó: "Nena, metí la pata"

Al médico que le atendió se le imputa un delito de "lesiones gravísimas culposas".

Una matrona atendiendo a una mujer embarazada

Una matrona atendiendo a una mujer embarazadaFreepik

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Nena, metí la pata. Sé que Dios me va a perdonar!", con estas palabras Marinel Vera se enteró que su médico obstetra le había realizado una ligadura de trompas que nunca solicitó. El resultado: la imposibilidad de engendrar más bebés.

El suceso ocurrió en septiembre del 2020, cuando la mujer tuvo a su bebé en un hospital privado de Mendoza, Argentina. Por un error que nadie se explica acabó con las trompas ligadas.

Cuando la intervención finalizó una doctora le mostró a la mujer "dos bolitas de carne" y le dijo "esta es la muestra de que el trabajo se hizo", relata la víctima.

La mujer preguntó entonces a qué trabajo se refería y la respuesta de la doctora la dejó en shock: "El de las trompas". Minutos después el médico ingresó a la sala y le dijo que todo había sido un error: "Nena metí la pata, discúlpame, pensé que era mi otra paciente, me equivoqué de paciente", según consta en el escrito de acusación.

Tras ello, la paciente se puso en contacto con sus abogados y denunció a los médicos que la atendieron por mala praxis. "Es una imputación grave porque tiene como consecuencia la fatalidad de que se le ha imposibilitado a la mujer engendrar", ha advertido la abogada de la damnificada, Agustina Maddiona.

Ahora, al especialista que le practicó la operación se le imputa un delito de "lesiones gravísimas culposas".

Estéril por un error médico

En 2019 otra mujer embarazada pasó por una situación similar. En esta ocasión acudió al hospital para recibir una inyección nutricional recomendada por su ginecólogo, pero lo que en principio era una visita rutinaria terminó por convertirse en un aborto por error.

El médico que trató a la mujer no comprobó el historial ni la identidad de su paciente y tomó un expediente que no le pertenecía, procediendo a realizar el aborto que se indicaba en el documento.

La mujer no fue informada de la intervención y al día siguiente regresó al hospital quejándose de un sangrado. Fue entonces cuando descubrió que había abortado.

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