EEUU

Un joven rompe a llorar tras ser declarado no culpable de matar a dos personas durante unas protestas en EEUU

El joven estaba acusado del asesinato de dos personas durante los disturbios que se sucedieron tras las protestas raciales en Kenosha (Wisconsin) en agosto de 2020.

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Un jurado ha exculpado de sus cargos a Kyle Rittenhouse, un joven que se enfrentaba a una pena por matar cuando tenía 17 años a dos personas durante los disturbios raciales en Wisconsin, Estados Unidos.

El jurado ha determinado no culpable a Rittenhouse de los cinco cargos que se le imputaban, entre los que figuraban homicidio intencionado en primer grado e intento de homicidio intencionado en primer grado.

La sentencia ha causado indignación en la calle y miles de personas han salido a protestar ante el fallo judicial. Las protestas se han desarrollado en ciudades como Nueva York, Portland o la propia localidad de Kenosha.

En Nueva York han sido detenidas cinco personas en el barrio de Queens, donde se han registrado también algunos daños materiales, según ha informado la Policía de Nueva York. Unos 300 manifestantes también se reunieron frente al Barclays Center de Brooklyn para denunciar el veredicto como un ejemplo de doble rasero racial en el sistema judicial estadounidense. Las protestas se han repetido en la ciudad de Portland, donde cerca de 200 personas protagonizaron una violenta concentración frente al Centro de Justicia de la ciudad.

¿Cómo y cuándo fueron los hechos?

Los hechos sucedieron la noche del 25 de agosto de 2020 en mitad de la tercera jornada de altercados en Kenosha. La ciudad estaba inmersa en una ola de protestas y disturbios contra la brutalidad policial con los afroamericanos. En algunos puntos las manifestaciones pacíficas degeneraron en altercados.

En uno de esas disputas, el joven Rittenhouse mató a dos manifestantes e hirió a un tercero, en medio de choques entre grupos de civiles armados y manifestantes.

Durante el proceso judicial, el joven testificó que actuó en defensa propia cuando abrió fuego aquella noche. Este caso ha suscitado grandes divisiones en la sociedad estadounidense y ha instigado un debate nacional sobre el hecho de que los ciudadanos se tomen la justicia por su mano, el derecho a portar armas y la definición de defensa propia.

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