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ASÍ LO UTILIZA

Isabel II usa su bolso como 'código secreto' para comunicarse con sus asistentes en los grandes eventos

El bolso es mucho más que un simple complemento de su indumentaria. Uno de los historiadores de la Casa Real británica ha contado que Isabel II lo utiliza para comunicarse con los servicios secretos.

Recepciones, discursos, viajes, más recepciones... la reina Isabel II necesita un respiro. Y sabe cómo pedirlo. Ha desarrollado un código secreto con sus asistentes en el que su bolso es fundamental.

Si una conversación le resulta aburrida o incómoda, lo cambia de mano. Eso hizo cuando recibió en Buckingham a la primera ministra, Theresa May. Primero lo sujeta con la izquierda. Después lo pasa a la derecha. Señal de que no aguanta más, según el historiador Hugo Vickers.

Asegura que sus asistentes están entrenados para hacer algo que libere a la reina de la situación. También saben que, si quiere irse en cinco minutos de un evento, posa el bolso sobre la mesa. Su inseparable accesorio es, según esta teoría, su mejor aliado. Pero ¿y si no lleva bolso? Siempre le queda el anillo. Moverlo, como parece haber hecho ante la ministra principal de Irlanda del Norte, es también un grito de socorro.

En casos más extremos, dice el historiador, pulsa discretamente un timbre para que alguien llegue en su rescate. Isabel II no es el único miembro de la Familia Real que se escuda tras estos complementos. La duquesa de Cambridge suele agarrarlo con las dos manos para disimular los nervios o indicar que no le apetece dar la mano.

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