El primer ministro israelí Benjamin Netanyahu, junto al presidente francés Francois Hollande

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EN PROTESTA POR LOS ASENTAMIENTOS

España, Francia y Reino Unido convocan a sus embajadores israelíes

Estos países, a los que se ha sumado Suecia, quieren manifestarles su desacuerdo con el anuncio del Gobierno israelí de la construcción de 3.000 nuevos asentamientos en Cisjordania, especialmente en la zona denominada E1, con lo que se parte en dos Cisjordania.

El ministro de Asuntos Exteriores español, José Manuel García-Margallo, ha anunciado que ha dado instrucciones al secretario de Estado para que convoque al embajador de Israel, con el fin de hacerle partícipe del "disgusto" por las dos medidas anunciadas por el Gobierno israelí. El ministro ha señalado que el objetivo de convocar al embajador es mostrar la oposición del Gobierno a la decisión de Israel de retener los impuestos recaudados en nombre de la Autoridad Palestina y de continuar la política de asentamientos en Cisjordania.

García-Margallo ha resaltado que la adhesión de la Autoridad Palestina como miembro observador de la ONU es "una nueva oportunidad para la paz, para hacer arrancar unas negociaciones" que han estado bloqueadas mucho tiempo y llegar a "un Israel seguro y una Palestina viable".

En la misma línea, el Ministerio de Exteriores francés ha convocado al embajador israelí en París, Yossi Gal, en protesta por las nuevas colonias autorizadas en la zona palestina de Jerusalén y en Cisjordania, tal y como ha confirmado la legación diplomática israelí. De esta forma, el Gobierno francés muestra su desaprobación a la intención de Israel de construir 3.000 viviendas suplementarias en Jerusalén Este y en Cisjordania, tal como avanzó este fin de semana el ministro galo de Exteriores, Laurent Fabius.

El ministro calificó de "grave" la decisión israelí y dijo que significa un "obstáculo serio para la solución de dos Estados". Fabius dijo que además es un "perjuicio para la continuidad territorial de un futuro Estado palestino" y dificultaría "la confianza necesaria para una reanudación del diálogo" entre las dos partes. La decisión israelí fue tomada un día después de que el pasado jueves la Asamblea General de la ONU admitiera a Palestina como Estado observador, una decisión que Francia votó favorablemente.

Amenaza la creación de los dos Estados

Por su parte, el Ministerio de Asuntos Exteriores del Reino Unido ha hecho lo mismo pero con el embajador israelí en la capital británica para protestar por los planes de Israel de construir 3.000 asentamientos en Cisjordania y Jerusalén Este, confirmó el Foreign Office. En un comunicado, el Ministerio señala que "deplora" la decisión del Gobierno israelí porque amenaza las perspectivas de conseguir la creación de dos Estados, Palestina e Israel. El Foreign Office señaló que el embajador israelí, Daniel Taub, fue convocado esta misma mañana por el viceministro para Oriente Medio del Ministerio, Alistair Burt.

Suecia se une a la medida

Asimismo, el Gobierno sueco ha hecho lo mismo con el embajador israelí en Estocolmo para mostrarle su oposición. Bildt recordó que Reino Unido y Francia han tomado medidas similares. "Discutiremos con otros países de la UE otros pasos", advirtió el ministro de Exteriores sueco. Bildt resaltó que el acuerdo de alto el fuego entre Hamás e Israel no es suficiente y animó a la UE a romper el bloqueo israelí sobre Gaza. La oposición criticó al Gobierno de centro-derecha sueco por ir a rebufo del resto de países de la Unión Europea y le pidió que tome la iniciativa para reconocer como estado a Palestina.

Tras la votación de la Asamblea General de Naciones Unidas que otorgó a Palestina el pasado jueves el rango de Estado observador no miembro, Israel anunció que construiría más viviendas en la Cisjordania ocupada y la confiscación de los salarios de funcionarios palestinos por valor de unos 94 millones de euros. En la votación, Francia votó a favor y Reino Unido se abstuvo.

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