En un encuentro mantenido con el embajador de Malasia en China, Iskandar Sarudin, y autoridades de Aviación Civil del país vecino, las familias de los desaparecidos en el vuelo MH370 de Malaysia Airlines han reclamado que se intensifique la búsqueda del avión desaparecido no sólo por mar, sino también por tierra, después de que algunos de ellos llamaran a teléfonos de sus allegados y "dieran tono".
En esa reunión, los familiares pidieron a Malasia que investigara lo ocurrido con los teléfonos, así como conocer la última conversación que mantuvo el piloto con la torre de control antes de perderse el contacto. "Entendido, buenas noches", contestó por última vez el piloto a las autoridades aéreas de Malasia cuando éstas le informaron de que entraba en espacio aéreo de Vietnam, poco antes de que se perdiera la señal, según revelaron oficiales de Aviación Civil malasios durante el encuentro.
El grupo de cientos de familiares concentrado en el hotel pequinés denunció la escasez de información y los detalles confusos de la investigación que les van llegando, cuando llevan casi cinco días de angustia desde que el vuelo MH370 desapareciera con 239 personas a bordo, entre ellos 154 ciudadanos chinos. Mientras algunos de los familiares de estos viajeros ya se han desplazado a Malasia en vuelos pagados por la compañía -en total, 115 según la cadena CCTV-, una gran mayoría se ha quedado en la capital china hasta que se conozcan más datos.
El embajador de Malasia, no obstante, informó de que se han tramitado 315 visados más, que serán repartidos mañana, para quien quiera viajar a Kuala Lumpur. El primer ministro de Malasia, Najib Razak, ha pedido paciencia a los familiares de las personas que viajaban en el avión de Malaysia Airlines, y aseguró que "el Gobierno está haciendo todo lo posible para contar con más personas, aviones y barcos con equipos avanzados".
"Estoy convencido de que acabaremos por encontrarlo. La cuestión es cuándo", dijo Razak en una entrevista al canal de televisión Alhijrah. El vuelo MH370 despegó el sábado de Kuala Lumpur a las 00.41 hora local (16.41 GMT del viernes) y tenía previsto aterrizar en Pekín tras seis horas de vuelo, pero desapareció del radar una hora después del despegue. Australia, China, Estados Unidos, Filipinas, Indonesia, Japón, Malasia, Nueva Zelanda, Singapur, Tailandia y Vietnam participan en la búsqueda, que empezó en el golfo de Tailandia y ya se ha extendido hasta el mar de Andamán, en el Índico, sin encontrar el aparato o restos de él.
El jefe de la Autoridad de Aviación Civil de China aseguró el martes que las pesquisas se habían ampliado para incluir áreas de tierra firme, no obstante, el Ministerio de Asuntos Exteriores chino lo ha desmentido en rueda de prensa. Las autoridades malasias no descartan ninguna hipótesis sobre la desaparición del avión, incluido el secuestro y el sabotaje.