Un exministro de Merkel pide una valla para parar flujo de refugiados

El diputado socialcristiano alemán Hans-Peter Friedrich, que fue ministro de Interior durante el segundo Gobierno de Ángela Merkel, pidió levantar una valla en la frontera para detener el flujo de refugiados. "Necesitamos señales claras y una valla sería una señal", dijo Friedrich en declaraciones al canal Phoenix, de la televisión pública alemana.

La Unión Cristianosocial (CSU), partido al que pertenece Friedrich, es considerada como el ala bávara de la Unión Cristianodemócrata (CDU) de Merkel y forma parte de la actual coalición de Gobierno en Alemania con tres ministerios.

No obstante, en lo referente a la política de refugiados, la CSU se ha distanciado claramente de Merkel y exige desde hace meses una política más restrictiva, a lo que se han sumado los sectores más conservadores de la CDU. Friedrich dijo hoy que la mayoría de los diputados de la coalición todavía respalda a Merkel pero cree que eso puede cambiar.

"Hay que volver a tomar en serio a los ciudadanos"

"La mayoría se está deteriorando y cuando la mayoría cambie a los responsables, tendrán que cambiar su política", dijo Friedrich. Friedrich sostiene que las dudas frente a la política de refugiados de Merkel no se limitarán a la CDU y la CSU sino también empezarán a darse dentro del Partido Socialdemócrata (SPD), la otra agrupación de la coalición de Gobierno.

"El SPD se verá bajo presión, la gente de la calle es la que más sufre con la actual política de asilo", dijo. Friedrich reiteró la propuesta de su partido de establecer un tope máximo de refugiados que reciba Alemania anualmente. Merkel ha rechazado esa propuesta en varias ocasiones alegando que el derecho de asilo es algo que no conoce topes máximos.

Por otra parte, el político bávaro se refirió al creciente ascenso en las encuestas el partido populista de derechas Alternativa por Alemania (AfD), que tiene en su rechazo a la política de refugiados su principal baza electoral.

Friedrich dijo que es posible parar ese ascenso antes de las elecciones generales de 2017, pero consideró que para ello "hay que volver a tomar en serio a los ciudadanos". La AfD está actualmente en torno al 10 por ciento en las encuestas de intención de voto.