En Estados Unidos sólo en la noche del domingo a este lunes se han registrado 61 muertos más. Por eso, ciudades como Nueva York o Los Ángeles cierran colegios, restaurantes y lugares de ocio.
Estados unidos ha recomendado que se cancele todo evento con más de 50 personas aunque la administración Trump no los ha prohibido y el presidente declara que tiene un control tremendo sobre el coronavirus. Situación difícil en los aeropuertos tras la llegada de estadounidenses , que se aglomeran durante horas en las terminales por las nuevas preguntas y pruebas que se les hacen.
El alcalde de Nueva York, Bill de Blasio, ha anunciado este domingo que ha ordenado el cierre de todos los bares y restaurantes, en lo que solo permitirá comida para llevar o entrega a domicilio, así como el de todos los locales de ocio nocturno, en el marco de la lucha de la Gran Manzana por afrontar la pandemia de coronavirus.
Las restricciones entrarán en vigencia a partir de este martes a las 9 de la mañana y son similares a las medidas anunciadas en otras ciudades de Estados Unidos como Ohio o Washington DC. "Nuestras vidas están cambiando de forma inimaginable desde hace solo una semana", dijo De Blasio en un comunicado emitido por el Ayuntamiento de Nueva York, en el que reconoció que el paso va a ser "drástico".