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Reino Unido

La casa real británica busca un experto en diversidad tras las acusaciones de racismo de Meghan Markle

La corona buscará la colaboración de minorías, homosexuales y transgénero y aseguran que toda la familia apoya el proyecto.

Los Windsor intentan recomponer su imagen pública después de la entrevista de los duques de Sussex y por eso hay un tira y afloja de declaraciones, de intenciones y en las últimas horas todas giran en torno a la salud mental.

Esto es lo que ha escrito Harry en un libro para los hijos de aquellos que lucharon contra la pandemia y perdieron la vida. "Cuando era un niño, perdí a mi madre. En ese momento no quería creerlo o aceptarlo y dejó un enorme vacío dentro de mí. Sé cómo te sientes y quiero asegurarte que con el paso del tiempo ese vacío se llenará con mucho amor y apoyo".

Un mensaje que la prensa lee en clave de agradecimiento a su mujer. Meghan Markle ha recibido un duro ataque de su hermanastra.

Harry quiere ser un apoyo en la salud mental de Meghan

El duque y la duquesa de Cambridge mantienen su lado royal perfecto, preocupados por la salud mental de los sanitarios en pleno coronavirus. Una imagen de serenidad que poco tiene que ver con la de su hermano Harry, el pequeño de Diana ya ha dejado claro que se hundió en el caos al morir su madre. Recuerda que vió a su mujer en crisis y no quiso que le pasara lo mismo.

"Lo que veía es que la historia se repetía", explicaba Harry en la entrevista. La Casa Real siempre ha sido muy hermética con su imagen y poco dada a terapias, al menos en público, porque Carlos, Diana y la princesa Margarita si utilizaron ese bastón. De hecho fue William quien le aconsejó un psicólogo a su hermano menor.

Tampoco ayuda a la pareja las declaraciones de la familia de Meghan. Su medio-hermana la califica de psicópata narcisista, de mentirosa compulsiva, de un peligro para los nietos de la Reina Isabel.

Samantha asegura que Meghan manipula a Harry porque es un hombre frágil. Los Windsor, asevera, deberían alejarla de él.