33.002500

Publicidad

Vacuna coronavirus

EEUU podría comenzar a vacunar contra el coronavirus a la población el 12 de diciembre

La vacuna contra el coronavirus podría empezar a inyectarse a la población en EEUU el 12 de diciembre si la desarrollada por la farmacéutica Pfizer consigue el visto bueno de la Agencia de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos. El país norteamericano podría volver a una situación muy parecida a la normalidad en primavera de 2021 cuando el 70% de la población se haya vacunado.

En resumen

Estados Unidos podría empezar a vacunar contra el coronavirus a la población el próximo 12 de diciembre según ha anunciado el principal asesor de la Operación 'Warp Speed', el equipo de la Casa Blanca que intenta acelerar las soluciones médicas a la pandemia. Comenzaría así la vacunación con Donald Trump todavía como presidente.

Los asesores de la Agencia de Alimentos y Medicamentos de EE.UU, se reunirán el próximo 10 de diciembre para decidir si aprueban la vacuna desarrollada por la farmacéutica Pfizer y su socia alemana BioNTech.

Si la vacuna contra el coronavirus de Pfizer consigue el visto bueno ese mismo día, el Gobierno estadounidense está "preparado para empezar a distribuir las vacunas en las 24 horas siguientes a su aprobación", aseguró Moncef Slaoui, en una entrevista con la cadena ABC News.

"Tendremos las vacunas un día después de la aprobación, y esperamos que la gente pueda empezar a ser inmunizada, diría que en las 48 horas siguientes a la aprobación", es decir, el 12 de diciembre, añadió Slaoui.

El asesor de la Operación 'Warp Speed' calculó que si todo salía según lo previsto Estados Unidos podría volver a lo más parecido a una nueva normalidad "en algún momento del mes de mayo" de 2021, cuando estimó que el 70% de la población habrá recibido la vacuna y se habrá logrado una inmunidad de grupo.

El país norteamericano se enfrenta a todo un récord al tener una población de 330 millones de habitantes. La vacuna contra el coronavirus de Pfizer requiere dos dosis administradas a unas tres semanas de diferencia, y ha demostrado hasta un 95 % de eficacia en pruebas clínicas preliminares, sin grandes problemas de seguridad.

Las vacunas contra la COVID-19 se distribuirían de forma proporcional a la población de cada estado en EEUU y cada territorio podrá decidir quién tendrá prioridad para recibirla, normalmente entre la población de alto riesgo y los profesionales médicos, explicó Slaoui.