Una tumba en un cementerio (archivo)

Publicidad

Agresión

Dos jóvenes violan, torturan y entierran vivos a dos adolescentes en un cementerio en Suecia

Las víctimas se negaron a comprarle droga a los agresores, tal lo cual les secuestraron y torturaron, llegándoles a violar. Después, los jóvenes atacantes les obligaron a quitarse la ropa y los enterraron vivos en un cementerio de Suecia.

En resumen
  • Los dos presuntos agresores, de 18 y 21 años, ya han sido detenidos

El pasado sábado por la noche dos adolescentes fueron torturados, violados y enterrados vivos en Suecia, concretamente en la ciudad Solna, un área en las afueras de la capital, Estocolmo.

Según el testimonio de la Policía, que recoge el periódico local Aftonbladet, la pareja fue secuestrada hacia las 23:00 horas y llevada a un cementerio cercano después de rechazar una oferta de compra de drogas.

Durante la noche, fueron sometidos a una prolongada agresión, que incluyó ser apuñalados en las piernas y ser violados.

Después de la brutal agresión, los adolescentes fueron obligados a quitarse toda la ropa y a meterse en un pozo en el suelo, antes de ser enterrados vivos. Los que no se ha revelado, sin embargo, es la edad de las víctimas, aunque ambas son menores de edad.

Tampoco está claro el motivo del ataque, pero la Policía cree que los dos fueron seleccionados al azar.

Qué ocurrió después

Los chicos fueron encontrados por un transeúnte a las 8:39 horas del domingo, casi diez horas después de que comenzara el ataque. La policía llegó al lugar y detuvo al primero de los dos presuntos autores, un joven de 18 años, sólo siete minutos después, a las 8.46 horas.

El segundo sospechoso, otro joven de 21 años, fue detenido 16 minutos después. Al parecer, estas detenciones han sido tan rápidas porque el transeúnte identificó a los dos cuando trataron de escapar del cementerio por un camino estrecho.

Los dos han sido acusados de secuestro, agresión con agravantes, violación y robo con agravantes, aunque ambos niegan los cargos. Hasta que se celebre el juicio, un tribunal ha dictaminado que los acusados deben permanecer en prisión provisional debido a la evidencia de las pruebas: uno de los detenidos llevaba posesiones de las víctimas.

Ambos detenidos eran conocidos reincidentes por las autoridades suecas.