Los padres junto a el bebé

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EN REINO UNIDO

Un bebé que nació sin piel sobrevive pese al mal pronóstico de los médicos: "Era como un trozo de carne cruda"

Kaiden Jake Shattock, que nació sin la capa superior de la piel, ha desafiado las probabilidades que tenía de sobrevivir. Los médicos advirtieron de que que era improbable que el bebé sobreviviera, ya que nació con solo el 2% de su piel, lo suficiente para cubrir su rostro.

Un bebé que nació sin la capa superior de la piel ha desafiado las probabilidades que tenía de sobrevivir. Kaiden Jake Shattock, que ahora tiene seis meses de vida, nació con una enfermedad rara, con solo el 2% de su piel, lo suficiente para cubrir su rostro.

Jessica Kibbler y Jake Shattock, que tenían 19 años cuando tuvieron a su bebé, cuentan que el pequeño tenía tanto dolor que incluso las enfermeras no podían evitar llorar. Kaiden nació en la semana 30 y, aunque Jessica tuvo algunas complicaciones durante el embarazo, no hubo indicios de su enfermerdad.

Los padres, de Leamington Spa (Reino Unido), describieron a Kaiden "como un trozo de carne cruda" cuando lo vieron por primera. "Cuando las enfermeras nos llevaron a la habitación para presentarnos a Kaiden por primera vez, él estaba crudo, como un trozo de carne cruda", cuenta Jessica en una entrevista recogida por el diario The Mirror.

"Allí estábamos, dos nuevos padres de 19 años, sin experiencia en la crianza de los hijos, y nuestro primero nació muy débil y muy enfermo. Jake y yo lloramos, pero incluso las enfermeras salieron de la habitación y lloraron porque no sabían qué decir y no sabían de qué otra manera ayudarlo", relata.

Kaiden estaba muy débil, naciendo solo con piel en la cara, no podía usar ropa. Milagrosamente pudo crecer algo de piel después de seis semanas, aunque es tan delgado y frágil que es propenso a rasgarse y rascarse.

En su corta vida, el pequeño ha luchado contra la enterocolitis necrotizante, el herpes congénito, la dermólisis y la bronquiolitis debido a su falta de piel y al parto prematuro. Aunque los médicos advirtieron a los padres que era improbable que el bebé sobreviviera, Jessica y Jake dijeron que harían todo lo posible por ayudar a su hijo.

La joven madre cuenta que, después de pasar seis semanas en cuidados intensivos y de no poder regresar a casa hasta que tuviese 11 semanas, Kaiden ahora pesa 4,39 kilos y está "muy feliz". "Ahora está muy feliz y mucho mejor después de todo el tratamiento que ha recibido", señala.

Los médicos originalmente especularon que su afección de la piel era causada por una combinación de herpes sepsis congénita, pero desde entonces ha descartado eso y ha analizado numerosos trastornos de la piel. El caso de Kaiden está siendo examinado por especialistas en el extranjero.

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