Lotería de Navidad 2019: Lo que no te cuentan si ganas el Gordo de Navidad

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Lotería de Navidad 2019

Lotería de Navidad 2019: Lo que no te cuentan si te conviertes en rico

Muchos sueñan con ganar el Gordo de la Lotería de Navidad 2019 pero, ¿crees que convertirte en rico sólo tiene ventajas? Te desvelamos todo lo que no cuentan sobre ganar el Gordo de Navidad.

La Lotería de Navidad 2019 es el sorteo de boletos que implica a una mayor proporción de una población, ya que en 2018 el 73,7% de los residentes en España entre 18 y 75 años compró lotería del sorteo de Navidad, lo que equivale a 25,5 millones de personas con la misma ilusión, ganar el primer premio Gordo de la Navidad y recibir la abundante cantidad de dinero correspondiente.

Sin embargo, existen aspectos negativos sobre la realidad de los premiados en el sorteo de la Lotería de Navidad.

Recibir grandes cantidades de dinero instantáneamente puede acarrear graves consecuencias. Esto se debe a que al recibir tanto dinero de golpe es normal querer gastarlo (viajes, mansiones, coches...). En definitiva, cambia el estilo de vida que llevabas hasta entonces. Por ello, resulta imprescindible gestionar y administrar el dinero ganado en la Lotería de Navidad, de lo contrario, se acabará gastando y todas las inversiones que has hecho se volverán en tu contra ante la imposibilidad de mantenerlas. Más de la mitad de los premiados en el sorteo extraordinario de Navidad han llegado a arruinarse, por malas gestiones, en menos de ocho años.

Al haberte tocado el premio de la Lotería de Navidad una vez, es lícito pensar que la suerte va a volver a acompañarte, por ello, la mayoría de los agraciados en el sorteo de Navidad juegan a la lotería semanalmente. En cambio, la probabilidad de que el bote vuelva a tocar es muy baja.

Al cambiar el estilo de vida y los gastos, las relaciones personales y sociales cambian. Alejarse de las amistades constituye uno de los aspectos más comunes de los ganadores de El Gordo de la Lotería de Navidad, debido a que estos no podrán mantener el mismo ritmo de vida (cenas en restaurantes de lujo, viajes, e incluso, caprichos).

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