PP

Sémper no sabe cómo reaccionar ante la intervención de la telepredicadora en el acto del PP del sábado

Insisten en la mujer no pertenece al Partido Popular y que nadie le preguntó ates lo que iba a decir.

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La Federación de Entidades Religiosas Evangélicas de España ha pedido a los ministros de culto evangélico que "eviten utilizar su influencia pastoral para condicionar el voto de los creyentes", algo que sucede tras la participación de una pastora evangélica en evento que se celebró este pasado fin de semana del Partido Popular Europeo bajo el lema 'Europa es Hispana'. En dicho evento intervinieron el presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, y el alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida.

FEREDE subraya en un comunicado recogido por Europa Press que "recomendamos que los ministros de culto eviten utilizar su influencia pastoral para condicionar el voto de los creyentes". La Federación de Entidades Religiosas Evangélicas de España ha aclarado, además, que los fieles en España son "plurales en sus preferencias políticas particulares", a lo que añade que "las opiniones particulares de los fieles evangélicos sobre cualquier asunto expresadas en público o en privado, se encuentran amparadas en el marco del derecho individual a la libertad de expresión y solo representan a quien las profiere".

El portavoz del partido, Borja Semper, ha tenido dificultades para explicar la presencia de esta mujer, una telepredicadora que ejercía de telonera, cuyo discurso se ha hecho viral. Sus palabras: "Señor pedimos Padre Celestial que cada día el amor en el corazón de este partido". Sémper justificaba este momento diciendo que "hay realidades sociales, culturales, religiosas, que tiene sus expresiones. Este fin de semana ha tenido una expresión", en referencia a la telepredicadora. Insisten, además, en que la mujer no pertenece al Partido Popular y que nadie le preguntó ates lo que iba a decir.

Desde FEREDE defienden "la separación Iglesia-Estado" y aclaran que su "política de neutralidad" está recogida en su Código Ético: "La federación es una entidad religiosa que no tiene vinculación con ningún partido o ideología política", aseguran.

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