El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, convocará a los partidos a una reunión la semana próxima para evaluar la posibilidad de ir ahormando un gran acuerdo de país como el de los Pactos de la Moncloa que permita hacer frente a la crisis económica y social que se viene encima como consecuencia de la pandemia de coronavirus.
El jefe del Ejecutivo evitó hacer autocrítica de su gestión asegurando que "toda Europa llegó tarde, pero España actuó antes".
El jefe del Ejecutivo ha solicitado a la oposición en reiteradas ocasiones en su primera intervención "unidad y lealtad" y ha reclamado al principal partido de la oposición, el PP, que aprenda de la responsabilidad que está demostrando, a su juicio, la oposición de derechas portuguesa o el nuevo líder laborista británico, que han ofrecido su apoyo sin reservas al Gobierno.
"Todos estamos llamados a esos pactos. ¿Están dispuestos? Yo lo estoy", ha exhortado a los diputados.
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, afirmó que “nos encontramos cerca de iniciar el descenso, la desescalada” porque “el incendio que desató la pandemia comienza a estar bajo control”, tras semanas "de lucha agónica".
Así lo trasladó en su intervención ante el Congreso de los Diputados para solicitar una nueva prórroga del estado de alarma hasta el 25 de abril inclusive, una medida que consideró "imprescindible” y “esencial para proteger la vida y salud de nuestros conciudadanos” porque “el estado de alarma funciona”.
Sánchez insistió en que las “medidas drásticas tomadas, seguidas con disciplina, coraje y determinación” por la ciudadanía “han servido para salvar muchas vidas”, destacando que “la magnitud global de esta terrible pandemia es abrumadora” y “la velocidad y su propagación es vertiginosa”.
Inició sus palabras con una mención a los fallecidos que mueren “en soledad”. “Nada compensará ese dolor, estoy seguro, pero les rendiremos, tan pronto como podamos, el homenaje que merecen. Si no tuvieron la cercanía de sus familiares, tendrán al menos el tributo del conjunto de la sociedad”, avanzó.
Además, el presidente mencionó a los “más de 52.000 curados” porque son hoy parte de nuestra “alegría colectiva y de nuestra esperanza”, dijo, de esta lucha contra la “mayor amenaza” para la salud pública del planeta desde la gripe de 1918.