Ante las dudas que ha generado la desescalada por coronavirus entre distintos sectores económicos y entre comunidades autónomas no se descarta que haya cambios en los criterios del plan. La hoja de ruta diseñada por Moncloa se basa en limitaciones por provincias e islas, pero se plantea que pueda realizarse ese avance en el plan de fases por áreas sanitarias.
La mayoría de comunidades autónomas, municipios, agentes sociales y asociaciones de distintos ámbitos económicos coincidieron en reclamar que se aclaren las dudas que ha generado el plan de desescalada del Gobierno para poder seguir adelante en su puesta en marcha con garantías para todos de no volver a caer en la expansión del coronavirus.
Las reacciones al llamado plan para la transición hacia una nueva normalidad van desde quienes lo consideran razonable hasta los que opinan que representa un grave error, pasando por quienes proponen pasar a la primera fase algún territorio o los que piden medidas adicionales para los ciudadanos que se reincorporen a su trabajo. Lo expusieron en una reunión con el Gobierno.
Aunque desde las comunidades se han mostrado molestos por enterarse del proyecto del Ejecutivo por televisión, ahora esperan que se ponga en marcha con responsabilidad y teniendo en cuenta las especificidades de territorios o sectores de actividad.
Por áreas sanitarias
Así las cosas, el Ministerio de Sanidad estudiará algunas propuestas que le han planteado esta miércoles las comunidades autónomas para que la desescalada no se desarrolle sólo por las unidades territoriales que se han marcado en el plan del Gobierno -provincias e islas-, sino también por otras como las áreas sanitarias.
El tema de fondo en la gestión de la pandemia es el plan de desescalada que aprobó ese mismo día el Gobierno y que tiene como horizonte finales de junio, con un programa en cuatro fases a distintas velocidades según las provincias o las islas más o menos afectadas por la pandemia.
Illa, momentos antes de reunirse con los consejeros en el Consejo Interterritorial de Sanidad, no descartaba estudiar algunas propuestas de las comunidades en las que la unidad territorial de referencia para la desescalada no fuera la establecida por el plan: las provincias o, en su caso, las islas.
Pero, siempre que se garantizará la estanqueidad de esa unidad en términos de movilidad, pero además otros criterios epidemiologicos, técnicos, sanitarios y económicos, que se deberán analizar.