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ANTE EL CONSEJO DE MINISTROS DEL DÍA 21

Los sindicatos de los Mossos dicen que no pueden garantizar la seguridad en plenas protestas por sus reivindicaciones laborales

Los Mossos están descontentos por la presión a la que están sometidos. Protestan por reivindicaciones laborales pendientes y, además, la situación política. Todo esto hace que duden de que estén en condiciones de garantizar la seguridad. Desde Madrid se prepara un importante refuerzo que será enviado a Barcelona para el día 21.

Los Mossos d'Esquadra han intensificado sus movilizaciones por cuestiones laborales y en ellas piden la dimisión del conseller de Interior, Miquel Buch. Tras el fracaso de una nueva reunión con la dirección, cerca de 200 agentes han cortado el tráfico en varias calles de Barcelona. Sus representantes permanecen encerrados y aseguran que no pueden garantizar la seguridad.

Los agentes han permanecido concentrados a lo largo de todo el día a las puertas del Departamento de Interior, después de que a media mañana una docena de sindicalistas decidiera mantenerse encerrados en la planta novena del edificio, tras acusar a los representantes de la administración de levantarse "unilateralmente" de la reunión negociadora.

Los mossos d'esquadra concentrados, en una movilización apoyada por todas las fuerzas sindicales del cuerpo, se han dividido esta tarde en dos grupos, que han cortado al tráfico durante cerca de un cuarto de hora la calle Aragó y, posteriormente, la avenida Diagonal de Barcelona, a gritos de "Buch, dimisión".

Con su movilización, la policía catalana exige a Interior mejoras laborales y salariales y su equiparación con las condiciones que la consellería a ofrecido al cuerpo de Bomberos de la Generalitat. David Miquel, del Sindicato de Policía de Cataluña, dice que "el hartazgo de los Mossos d'Esquadra es tal que cualquier cosa puede pasar".

Se refiere al próximo día 21 de diciembre, el día en que se reúne en Barcelona un Consejo de Ministros al que el conseller Buch se refiere de esta forma: "El consejo de ministros del Estado español". Y aparece una nueva forma de presión: "Cosas que hasta ahora no se han visto, como gripe azul", comenta Tony Castejón, del Sindicato de Mossos d'Esquadra. Es decir, una baja masiva el día 21 alegando enfermedad. El conseller de Interior cree que la seguridad está garantizada.

En el Ministerio del Interior mantienen la confianza en los Mossos garantizarán el orden público el día 21. Pero prepara el peor de los escenarios, que se repita la falta de órdenes de los últimos días para evitar las acciones de los CDR. Por eso, ya hay 400 antidisturbios de la Policía Nacional que se desplazarán a Cataluña el día 19. A los que se podría añadir un número similar de guardias civiles: "Como son actos espontáneos de cortes de vías, sí que se esperan problemas graves".

El pasado martes, en la reunión de coordinación de todos los cuerpos, se barajó como número máximo de refuerzo el de 1000 policías y guardias civiles.

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