El vicepresidente del Govern y conseller de Economía, Oriol Junqueras, ha admitido este miércoles que las polémicas declaraciones del dimitido senador de ERC Santi Vidal generaron "dudas que han hecho daño al Govern y a los profesionales de la agencia tributaria" catalana.
Lo ha dicho en una comparecencia en la Comisión de Asuntos Institucionales del Parlament donde, sin embargo, ha vuelto a negar las palabras del exsenador, asegurando de nuevo que la Generalitat no comete ilegalidades en la gestión de datos fiscales de los catalanes y que los profesionales de la agencia tributaria catalana trabajan con "absoluta profesionalidad".
El vicepresidente catalán ha expuesto que la Generalitat gestiona "grandes censos" de datos fiscales --algunos facilitados por organismos estatales para poder gestionar impuestos transferidos--, pero ha defendido que lo hace siempre en virtud de la normativa vigente.
Junqueras ha explicado en sede parlamentaria que la Generalitat está construyendo un nuevo sistema informático que se llama 'e-SPRIU' "capaz de gestionar cualquier tipo de impuestos", y ha argumentado que lo hace para modernizar el actual y ganar en eficiencia.
Sin alusiones a la independencia ni a la creación de una hacienda propia --en su primer turno de intervención--, Junqueras ha detallado que la Generalitat gestiona un conjunto de datos fiscales de los catalanes que ronda una dimensión de "20 terabytes".