El Juzgado de Instrucción 3 de Martorell (Barcelona) investiga a un profesor del IES El Palau de Sant Andreu de la Barca por presuntos delitos de discriminación y contra la integridad moral al pedir en clase el 20 de octubre de 2017 que levantaran la mano los hijos de guardias civiles.
Según ha informado este miércoles el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC), la denuncia presentada por la Fiscalía contra nueve profesores de este instituto se ha dividido en dos procedimientos: uno por los hechos ocurridos el 2 de octubre y otro por los del 20 de octubre, que atañen al profesor ahora investigado.
Según la denuncia de Fiscalía, este profesor pidió en una clase optativa de 3º de ESO "que levanten la mano los hijos de los Guardias Civiles". A los que lo hicieron les dijo que entendía que no quisieran hacer huelga el 25 y 26 de octubre por la condición de sus padres y entendía que no apoyarían la huelga porque sus padres no eran independentistas, así que deberían ir al instituto para hacer clases con normalidad, dice la denuncia.
Con ello, según el fiscal, puso "en evidencia ante todos los alumnos a aquellos que eran hijos de guardias civiles, señalándolos de esta forma para ser blanco del rechazo y la hostilidad de sus compañeros de aula", estando en la clase una menor hija de agente. Y, según la denuncia, el profesor actuó sabiendo el "gran rechazo social generado por el comportamiento humillante y sectario de sus compañeros profesores" el 2 de octubre, que tuvo gran eco social y mediático, por las jornadas de huelga de estudiantes convocadas por sectores sociales y políticos en favor de la independencia, dice el fiscal.
Mientras, la causa contra el resto de profesores denunciados por presuntamente humillar a hijos de guardias civiles en clase el 2 de octubre está pendiente de admitir a trámite por parte del Juzgado de Instrucción 7 de Martorell.
Denuncia de Fiscalía
La Fiscalía presentó denuncia ante el juzgado por presunto delito contra el ejercicio de derechos fundamentales en la modalidad de lesión de la dignidad de las personas por discriminación por nacionalidad, en concurso de normas con un delito contra la integridad moral, y un delito de injurias graves contra los Cuerpos y fuerzas de seguridad.
El fiscal asegura que los docentes aprovecharon las clases el día 2 para lanzar debates en las clases sobre la actuación policial el 1-O, afirmando, entre otros comentarios, que los guardias civiles eran "unos animales y unos bestias que solo saben dar palos", y que lo dijeron ante hijos de agentes, causando abatimiento y preocupación.
El fiscal del Servicio de Delitos de Odio y Discriminación describe que el día 2 varios maestros hicieron afirmaciones en clase asegurando que rechazaban dar clase normal y abrían un debate sobre la actuación policial "desproporcionada", lo que causó que varios alumnos hijos de guardias civiles se sintieran señalados y humillados.
"Perros rabiosos"
Una profesora de inglés presuntamente interrumpió su clase en Primero de ESO y exigió que los alumnos participaran en una protesta en el patio para condenar la violencia y afirmó, tras enseñar una foto de la actuación de la Guardia Civil, que parecían "perros rabiosos", ante una menor hija de agente, según el fiscal.
Además el fiscal explica que otra profesora se dirigió a su clase de 30 alumnos para que fuera a esa concentración: "El que esté a favor de la violencia policial que se quede en clase y el que no, que baje al patio".
Constata que los profesores actuaron en un contexto de un "patente clima de rechazo social contra la Guardia Civil y de la gran polarización que en ese momento afectaba a la sociedad catalana y el resto de España producida por las grandes tensiones derivadas del proceso independentista".
Sobre estos hechos está prevista una reunión el martes 8 de mayo de los secretarios de Estado de Seguridad, José Antonio Nieto, y de Educación, Marcial Marín, con una representación de los guardias civiles padres de alumnos del instituto.
Más de 1.000 personas, según los organizadores, se concentraron este martes a mediodía en la plaza del Ayuntamiento de Sant Andreu de la Barca para apoyar a los nueve profesores de El Palau denunciados por la Fiscalía, tras aparecer pintadas en el centro educativo.