ETA

El Gobierno vasco concede el tercer grado a Lierni Armendaritz, la etarra que asesinó al exministro Ernest LLuch

El Gobierno Vasco ha aprobado la autorización de la progresión a tercer grado penitenciario a seis presos de ETA en este último mes.

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El Gobierno vasco ha concedido el tercer grado, el régimen de semilibertad, entro otros, a la etarra que asesinó al exministro Ernest LLuch,Lierni Armendaritz, que fue condenada a 33 años de cárcel, pasa a ese grado tras asumir las competencias en prisiones el gobierno vasco.

Tercer grado a seis presos de ETA

El Gobierno Vasco ha aprobado la autorización de la progresión a tercer grado penitenciario a seis presos de ETA en este último mes. Ya suma 23 concesiones de régimen de semilibertad a reclusos de la organización terrorista desde que asumió la competencia de prisiones el pasado 1 de octubre.

Durante los primeros días de este mes de agosto se conoció que el Ejecutivo autonómico había concedido cinco terceros grados a los presos Zigor Orbe, Santiago Vicente, Aitor Herrera, Igor Martínez de Osaba y Lierni Armendaritz.

Lierni Armendaritz

En el caso de Lierni Armendaritz, fue condenada, además de por otros delitos, por el asesinato del exministro y diputado del PSC, Ernest Lluch, cuando formaba parte de el 'comando Barcelona'.

Dentro del resto de condenas que tiene, hay una de 34 años de cárcel por el crimen del concejal del PP en Sant Adrià de Besòs, José Luis Ruiz Casado de 47 años, como responsable del asesinato del miembro de la Guardia Urbana de Barcelona Miguel Gervilla, y otra de 47 años por el asesinato del concejal del PP de Viladecavalls, Francisco Cano.

23 terceros grados

Ya son 23 los terceros grados a los que el Gobierno Vasco ha dado luz verde con la autorización de las juntas de tratamiento de las prisiones. El pasado 1 de octubre de 2021 asumió la competencia de la gestión de las cárceles de Euskadi. Gobierno Vasco aprueba seis terceros grados a presos de ETA y suma ya 23 concesiones de régimen de semilibertad

El Ejecutivo vasco y las juntas de tratamiento tienen en cuenta cuando aprueban las progresiones de grado que los presos se han desvinculado de la banda, han rechazado la violencia, han reconocido el dolor causado, aceptado la legalidad penitenciaria y abonado la responsabilidad civil.

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