El expresidente de la Región de Murcia, Alberto Garre, ha pedido ser dado de baja como militante del PP en una dura carta dirigida al presidente del partido, Mariano Rajoy, en la que le acusa de "inacción ante la corrupción".
Garre, que ya había pedido públicamente la dimisión de su sucesor en el Gobierno regional, Pedro Antonio Sánchez, investigado en el 'caso Auditorio', acusa al PP de "despreciar la ejemplaridad exigible a los políticos y la asunción de responsabilidad política" que, según dice, defendieron durante muchos años.
En la carta, difundida por el diario regional 'La Verdad', admite que la responsabilidad judicial la decide el juez, pero añade: "Políticamente, quien ha negado hasta tres veces, por lo dicho, escrito y votado en sede parlamentaria, que renunciaría al cargo si era imputado (investigado), y no lo cumple, merece el reproche de cualquier partido democrático".
"Faltar a la palabra dada no se si es corrupción política, pero, desde luego, corrompe cualquier relación humana, también la política", añade Garre, que pregunta a Rajoy "qué más tiene que acontecer en el partido" para que "aprenda a distinguir entre la responsabilidad política y penal".
Garre critica especialmente que, pese a estar investigado, Sánchez haya vuelto a ser elegido presidente del PP regional --"hasta aquí hemos llegado", dice--. Y, en alusión al Congreso Nacional del partido, afirma que el PP ha "sepultado bajo las alfombras de la Caja Mágica madrileña las inmundicias de la corrupción política, apelando a que son cosas del pasado".
"De esta inacción ante la corrupción es usted el principal responsable. Y por eso me voy, porque ese clima es irrespirable", espeta a Rajoy en su misiva.
El hoy expresidente de Murcia sucedió a Ramón Luis Valcárcel cuando este se fue al Parlamento Europeo en 2014 pero, un año después, el candidato a las elecciones autonómicas no fue él, sino Pedro Antonio Sánchez. Ahora, Garre recuerda que él informó a Rajoy "de lo que podía pasar y ha pasado".
El expresidente murciano ya estaba distanciado de Rajoy y en marzo de 2016, ante la imposibilidad de formar gobierno, llegó a pedirle que diera "un paso atrás" para desbloquear la situación. Según dice, solo puede entender lo que está pasando con Sánchez cuando asiste "atónito" a "las declaraciones de un ministro de Justicia cuestionando las resoluciones judiciales o los informes de la Fiscalía" o al de Interior "sembrando dudas sobre los informes de la Guardia Civil". También recuerda que el propio Sánchez "desveló anticipada e imprudentemente" lo que correspondía decir los tribunales en el caso Púnica --en relación al archivo de su causa--.