Reforma laboral
El complejo escenario de la reforma laboral
La próxima semana se debate su convalidación en un Pleno en el Congreso y el PSOE intensifica sus contactos. Los votos necesarios para sacar adelante la norma, en el aire.
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El portavoz del PSOE en el Congreso, Héctor Gómez, ha dicho en el programa Espejo Público que confía en la validación de la reforma laboral. Asegura Gómez que la interlocución con todos los grupos es permanente: "Contamos con el respaldo de patronal, sindicatos y Comunidades Autónomas. No podemos seguir instalados en ese no a todo".
El gobierno sigue teniendo preferencia por los partidos que apoyaron su investidura pero estos se muestran reacios a validar el texto. La vicepresidenta segunda del Gobierno, Yolanda Díaz, ha viajado a Cataluña para defender la propuesta de la reforma laboral y redoblar la presión sobre Esquerra.
Díaz se rodea de los sindicatos mayoritarios: se reunirá por la mañana con UGT y por la tarde con CCOO. La vicepresidenta busca a la desesperada el sí de los socios de investidura para evitar que el apoyo de Cs ponga en jaque la legislatura.
¿Qué partidos aproyarían la reforma laboral?
Para conseguir la convalidación inmediata el Gobierno necesita más sí es que no es. Su socio, Unidas Podemos insiste en negociar con la mayoría de investidura y se niega a sacar adelante la reforma con Ciudadanos. El problema es que tanto PNV como ERC y Bildu quieren cambios en el texto y Pedro Sánchez se niega. Por eso la vicepresidenta segunda busca llegar a acuerdos de mínimos con estos grupos con compromisos a futuro.
Ciudadanos apoyaría la reforma laboral porque asegura su líder, Inés Arrimadas que es una norma muy relevante. "Nosotros como partido con sentido de estado trabajaremos para que el futuro del empleo no lo decida ERC ni Bildu. A nosotros no nos llama Pedro Sánchez para repartirnos el estado", y pide Arrimadas, que no se toque una coma y no se ceda al chantaje.
Si finalmente ERC, PNV y EH Bildu la rechazan, Ciudadanos podría entrar en la ecuación. El PSOE necesitaría entonces atraer a los partidos pequeños. Trece diputados de formaciones minoritarias. Son Más País, Teruel Existe, Nueva Canarias, Coalición Canaria, PDeCAT, UPN, Compromís, Teruel Existe y el Partido Regionalista de Cantabria.
De momento, desde el Gobierno apelan a la discreción. "Yo creo que es momento de discreción de cara a los últimos contactos y hay que tener confianza en la vicepresidenta Yolanda Díaz y yo la tengo", ha dicho la ministra de Derechos Sociales, Ione Belarra.
La portavoz del Gobierno, Isabel Rodríguez, asegura que defienden el texto en su integridad. "Ahora de lo que se trata es de convalidarlo en el Congreso. Lo que reclamamos es que los grupos escuchen y apoyen la reforma. Confiamos en su convalidación".
Sobre la posibilidad de que sus socios de investidura rechacen el texto Isabel Rodríguez asegura: "Si dicen no, no se lo dicen al Gobierno. Se lo dicen a la patronal y los sindicatos. Y será ante ellos ante quienes tienen que responder. Todas las partes han renunciado a sus planteamientos de máximos. No es una tramitación ordinaria, estamos convalidando, si sí o si no a esa ley".
"El Gobierno está en el qué, como hizo ayer con la revalorización de las pensiones. Queremos avanzar en acuerdos". La portavoz del Gobierno no ha querido valorar el apoyo de Ciudadanos: "De lo que se trata es de que lo apoye la mayor parte del arco parlamentaria. Lo grave es la postura del PP ante un acuerdo de los agentes sociales. Insisto, estamos en el para qué. Creo que lo mejor está por venir y estoy seguro de que vamos a poder hacerlo".
La reforma laboral se presenta ante Bruselas como uno de los grandes hitos del Gobierno y la Comisión Europea ya ha hecho una primera valoración positiva del texto
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