La vicepresidenta primera del Gobierno, Carmen Calvo, destacó este viernes el papel de “neutralidad política” a desarrollar por el Felipe VI como jefe del Estado y eludió también la confrontación con el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) tras la decisión de que el Rey no acuda a Barcelona a la ceremonia de nuevos jueces.
Así se pronunció Calvo en Andalucía cuando se le preguntó quién tomó la decisión de la no presencia de Felipe VI en dicha ceremonia.
“Se convierte en novedad lo que no es”. “El Gobierno está en su posición constitucional. La figura del jefe del Estado en la fórmula de monarquía parlamentaria no tiene responsabilidades políticas, ninguna, es una figura símbolo de la unidad de nuestro país, en la neutralidad política”, remarcó Calvo.
En esa línea, subrayó que “el Gobierno tiene que refrendar políticamente cuáles son las actuaciones y posiciones del Rey. Consideramos que nos movemos en el terreno en el que estamos obligados en la Constitución". Tras dibujar el papel del monarca, trasladó que desde el Gobierno “agrademos mucho al rey Felipe VI que sepa estar siempre en su sitio, que es el de neutralidad política”.
Aunque sin asegurar que la decisión fue de Moncloa, Calvo señaló que corresponde a “razones que ocupan el día a día y que, en este caso, se han convertido en novedad política por alguna razón ajena al rey Felipe VI y ajena al Gobierno”.
La vicepresidenta desvinculó la decisión sobre la sentencia que podría provocar la inhabilitación del presidente de la Generalitat de Cataluña, Quim Torra, aludiendo a que el Ejecutivo no sabe cuándo se conocerá la decisión del Tribunal Supremo.
Sobre la crítica que presumiblemente hará el presidente del CGPJ, Carlos Lesmes, a la ausencia del Rey, Calvo se limitó a señalar que ella es “gobierno y no Poder Judicial y respeto mucho lo que hace el Poder Judicial” por lo que “no tengo nada que decir”.