Memoria Democrática

Albares ordena hacer inventario en las embajadas para retirar todo rastro franquista: ropa de cama, vajilla...

La petición llega bajo el marco de la ley de Memoria Democrática, una de las normas insignia del Ejecutivo.

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Una de las normas bandera del Gobierno es la ley de Memoria Democrática. Una ley que lleva adelante y que, por ejemplo, declara ilegal la dictadura franquista y las sentencias de tribunales durante el régimen y que refuerza el compromiso del Estado en la búsqueda de desaparecidos de la Guerra Civil y durante el Franquismo. En la sede del Ministerio de Exteriores colgaban aún símbolos franquistas en la fachada. Ya han sido retirados. Ahora, el titular de este departamento, José Manuel Albares, ha ordenado a todas las embajadas realizar un inventario de símbolos de la dictadura en sus instalaciones.

La orden de Albares incluye vajilla, muebles o ropa de cama que todavía podrían estar en uso en algunas sedes diplomáticas. Son instrucciones de Exteriores "de obligado cumplimiento" para eliminar todos los símbolos contrarios a la memoria democrática. Cubertería, cristalería, todo. Además, en todos las sedes diplomáticas en las que haya retratos, placas, escudos e insignias que se consideren franquistas deberán ser notificadas a la Dirección General del Servicio Exterior antes del 1 de febrero de 2023.

Se deberá ofrecer una "descripción física" de los símbolos, con "fotografías y la indicación de la exacta ubicación". Tras ello, la Dirección General del Servicio Exterior hará llegar a los centros "instrucciones específicas" a las legaciones en donde se encuentren estos bienes que "podrían constituir fuentes secundarias de interés para el Centro Documental de la Memoria Histórica u otros archivos y museos".

Inventario para eliminar de las embajadas todo rastro de la dictadura

La ley de Memoria Democrática considera "elementos contrarios a la memoria democrática las edificaciones, construcciones, escudos, insignias, placas y cualesquiera otros elementos u objetos adosados a edificios públicos o situados en la vía pública en los que se realicen menciones conmemorativas en exaltación (...) de la sublevación militar y de la Dictadura". También de quienes dirigieron y participaron "en el sistema represivo".

Una ley que salda una "deuda histórica"

La ley de Memoria Democrárica retira los títulos nobiliarios concedidos por Franco, resignifica el Valle de los Caídos y otorga al Estado la responsabilidad de las exhumaciones. El texto impulsado por el Ejecutivo de coalición de PSOE y Unidas Podemos abre la puerta a estudiar posibles vulneraciones de derechos humanos entre 1978 y finales de 1983.

Félix Bolaños, ministro de la Presidencia, exclamó el día de la aprobación que a él le "hubiera encantado que la derecha española soltara lastre. Es una ley perfectamente homologable". Celebró que "de una vez por todas" se "salda una deuda con millones de españoles".

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