La firma de calificación Standard & Poors ha rebajado el "rating" de la Generalitat de Catalunya desde 'A+' hasta 'A' para la deuda a largo plazo, por los elevados niveles de déficit y deuda, según informa el grupo de valoración de riesgos.
Para el corto plazo, Cataluña lo mantiene en 'A-1', "por el déficit fiscal más alto de lo esperado y la acumulación de la deuda", lo que hace que también el "rating" de la Generalitat quede en perspectiva negativa. Standard & Poors recuerda en su nota que la Generalitat ya ha reconocido déficit fiscal, ya que la administración catalana anunció que en los Presupuestos de 2011, que está preparando, esta partida superará el 2 %.
Además, Standard & Poors advierte que "los indicadores de liquidez se han deteriorado", pese a lo cual la Generalitat va a seguir accediendo a financiación de terceros. Standard & Poors justifica su perspectiva negativa porque, a su juicio, "refleja los riesgos de que Cataluña no pueda recibir más transferencias del Gobierno central", por lo cual: "la liquidez podría deteriorarse por encima de nuestras expectativas".
"El peso de la deuda de Cataluña y el presupuesto se han deteriorado más allá de los niveles que son coherentes con una 'A+' de calificación", afirma Standard & Poors. Además, esta firma de "rating" augura un mayor debilitamiento de estos parámetros, de acuerdo con sus pronósticos en todos los escenarios.
Standard & Poors afirma que "el retraso en la aplicación de fuertes medidas de reducción de gastos en 2010 hará que sea muy difícil para Cataluña reducir su déficit fiscal a los objetivos acordados a nivel nacional en las regiones españolas (1,3 % del PIB regional en 2011)".
"Sin embargo, creemos que el Gobierno central puede proporcionar fondos adicionales a finales de 2011, para ayudar a alcanzar el objetivo de Cataluña", matiza la firma de calificación.
Además, los indicadores de liquidez de Cataluña se han deteriorado drásticamente, "ya que la región ha aprovechado de forma masiva los mercados al por menor, con problemas de corto plazo y a tasas de interés muy altas", en referencia al reciente recurso a emisiones de bonos minoristas. Sin embargo, todavía preven un acceso de Cataluña a la financiación externa de alto volumen, basado en el historial de la región entre 2009 y mayo de 2011.
"La perspectiva negativa refleja el riesgo de que Cataluña no pueda recibir las transferencias adicionales que ha solicitado del Gobierno central", sin la cuales "es probable que incurra en mayores déficits".
La perspectiva negativa refleja también la posibilidad de que Cataluña pueda encontrar dificultades inesperadas en la recaudación de fondos externos en los próximos meses.
Standar & Poors advierte que estudia nuevas rebajas y, en este sentido, avisa en su nota: "podríamos bajar la calificación de Cataluña si prevemos que el déficit después de gasto de capital será sustancialmente superior al 8 % - 10 % de los ingresos totales en 2011 o, más en general, se desviará de nuestro escenario base durante el período 2011-2013".
Esta firma también reduciría la calificación si detecta "que el acceso de Cataluña a la financiación externa se encuentra con obstáculos", aunque éste no es su "escenario base". Standard & Poors advierte que hará un seguimiento mensual de la situación de acceso de Generalitat a la financiación externa de los mercados, en especial antes de las grandes amortizaciones previstas en noviembre de 2011, cuando vencen 3.000 millones en bonos.