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La Ría de Ferrol se queda sin almejas: "Pasamos de recoger mil kilos al día a no llegar a 10"

La patrona mayor de la cofradía de Ferrol asegura que la caída en la producción de la almeja babosa ha sido constante desde que llegó al cargo hace 8 años.

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AlmejasAntena 3 Galicia

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La Ría de Ferrol se vacía de almeja. Nos lo cuenta Isabel Maroño, patrona mayor de la cofradía de Ferrol, en A Coruña. Ella llegó al cargo hace 8 años y asegura que la caída en la producción de la almeja babosa ha sido constante desde entonces.

"Al principio le echábamos la culpa a que hacía falta un saneamiento de la ría, pero se hizo el saneamiento integral y la situación no mejoró", asegura Maroño.

Las administraciones realizaron importantes inversiones para tratar de regenerar un banco marisquero del que durante décadas vivieron cientos de familias pero, hasta el momento, no se ha logrado. "Mejoró la calidad de las aguas pero lo cierto es que no mejoró la almeja".

Si echamos mano de los datos oficiales que constan en los registros autonómicos, en el año 2001 se extrajeron más de 342.000 kilos de almeja. Tan solo veinte años después, en 2021, la cifra no llega a los 26.000 kilos. Se trata de una pérdida de más del 90%. Ya estamos en 2022 y desde el pósito tienen claro que los datos de este año serán aún peores. "Ayer mismo se extrajeron en total 8 kilos de babosa, de sacar 1.000 al día a sacar 8".

Con esta situación muchas mariscadoras y mariscadores han dejado el oficio. "El que puede emplearse en otra cosa se va del mar y el que no cambia de arte, cada vez son menos los que van a la almeja porque no da", asegura la patrona.

Cambiar de arte significa dedicarse a otra especie, algo que también conlleva problemas. "Si hay más gente que se dedique a otra especie esa especie también se sobrecarga", asegura. La cuenta es sencilla, más marineros capturando pulpo –por poner un ejemplo- más cantidad de pulpo capturado al día, más sufre el recurso y más baja el precio. “Esto es una cadena”.

La situación preocupa en esta cofradía de Ferrol, en la que ya apenas 20 personas se dedican a diario a la almeja. También en las vecinas cofradías de Fene o Mugardos, donde acostumbran a mariscar en las mismas zonas y que se encuentran una situación similar.

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