Costes

Negocios y empresas, al borde de la quiebra por la factura de la luz: "En enero ya supuso más de un millón de euros"

La factura de la luz se ha encarecido más aún con la guerra en Ucrania. Muchos autónomos y empresas avisan de su precaria situación: "Esto no puede seguir siendo así".

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La factura de la luz y su encarecimiento siguen haciendo mella en las empresas españolas. Tanto es así que ya muchos comercios se plantean posibilidades como subir los precios de sus productos o no seguir operando directamente, ante lo mucho que les cuesta el mantenimiento de la factura y la producción, que les lleva a perder dinero en sus respectivos negocios.

El coste de la luz, que ya venía disparado en los últimos meses, se ha incrementado todavía más después de la invasión rusa de Ucrania. Son muchos los que temen que esto les pueda llevar a cerrar su propio negocio, puesto que pagar el precio de la luz y la producción es, en ocasiones, mayor que los beneficios obtenidos, por lo cual no pueden hacerse cargo de ello.

Así nos lo cuenta el empleado de una fábrica de cartón, que denuncia un sobrecoste de la luz que ha llegado a multiplicarse por cinco en el último año: "Lo que consumen sobre todo está en enero de 2021 factura unos 300.000 euros y en enero de este año ya supuso un 1.550.000 euros". Una cifra disparatada que, se teme, va a ser mayor tras la invasión rusa de Ucrania.

Hay quienes no suben los precios

Por miedo a perder a su clientela, o porque simplemente no les compensa, hay quienes no suben los precios a pesar del drástico aumento en el coste de la luz. Es el caso de Yolanda, que no sube ni un euro sus servicios en el local que regenta como costurera: "Las horas son las que son y la factura es la que pagamos de luz, exactamente el doble".

Así se encuentran muchos negocios, que incluso han llegado a recibir facturas de 4.000 euros por la luz, un precio enorme que ya se ven incapaces de asumir. El aumento de la luz no será el último, advierten los expertos, que temen una subida todavía mayor por el coste extra que les puede provocar a muchos negocios el encontrarse incapaces de seguir adelante.

Por si fuera poco, este viernes también ha habido otra mala noticia que conduce a peores expectativas: la inflación. Ha alcanzado su récord en los últimos 36 años tras elevarse un 7,6 % en febrero, siendo la más alta desde diciembre de 1986, y que también será un aliciente para conocer en las próximas semanas si el precio sigue subiendo, o, por el contrario, baja.

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