Primero fue Papá Noel, ahora, los Reyes Magos están preparando miles de cajas con muñecas tan viajeras como ellos y que están a punto de ser entregadas a sus destinatarios.
En cuestión de muñecas España es toda una potencia mundial. Buena parte de la producción de este juguete tiene DNI español, aunque muchas se fabriquen en China. Se diseñan en España, se fabrican en China y luego se venden por todo el mundo.
Seis de cada 10 muñecas españolas acaba en manos de niños extranjeros. La industria del juguete compensa la caída de las ventas en España con lo vendido en Italia, Francia, México o Estados Unidos.
La fabricación de muñecas da trabajo a un millar de personas en Alicante aunque hay quien mantiene viva esta tradición pero modernizándola, como Raquel: “Lo que hacemos es abrirla, abrirle la cabeza, para modificar sus facciones. Lo que hacemos es esculpirle los rasgos para cambiarle la expresión, le dotamos de una personalidad concreta”.
Son muñecas que vienen de Japón. Aquí se modifican artesanalmente al estilo occidental; se ponen a la venta en internet y aparecen coleccionistas de todo el mundo dispuestos a hacerse con esta pieza única. Su precio va desde los 800 euros a los 3.000.
En definitiva, muñecas españolas que dan la vuelta al mundo antes incluso de salir de su caja.