Una mujer de 60 años, una víctima colateral de la huelga de jueces: "Me tienen que pasar una pensión y está retenida"

Los letrados reclaman mejoras salariales. Consideran que en los últimos años han adquirido nuevas responsabilidades que deben ser retribuidas. Ese es el motivo de una huelga que entra en su cuarta semana.

El letrado es una figura indispensable en la celebración de cualquier juicio, en la gestión de los señalamientos y de muchos otros actos judiciales. Además por sus manos pasan miles de millones de euros. Es el dinero que se distribuye por vía judicial y que corresponde a nóminas, impagos, pensiones, indemnizaciones etc... Los letrados calculan que se ha paralizado el 60% de la actividad de los juzgados.

Colapso de la Justicia

Los peor parados por el colapso de la Justicia son aquellas personas que dependen de las partidas de dinero ahora inmovilizadas. A la puerta de los juzgados de Valladolid una mujer de 60 años, divorciada, se lamenta: "Me tienen que pasar una pensión de manutención para mi hija y está retenida". Asegura que su situación es desesperada, ha dejado de pagar la luz y algunas facturas.

En su mismo caso hay muchas personas que esperan un dinero que en justicia le corresponde y con el que no pueden contar por la inactividad en los juzgados. De momento el cálculo del dinero retenido supera los 500 millones de euros y cada día la cantidad aumenta.

Un juicio anulado supone una pérdida de tiempo y dinero

Javier tenía un juicio programado desde hace cuatro meses. Para participar hoy ha tenido que dejar de trabajar. Minutos antes de la hora prevista le han comunicado que el juicio se suspendía por la ausencia de los letrados, a la salida de los Juzgados de Plaza de Castilla no oculta su enfado: "Son unos sinvergüenzas, me lo dicen antes y no vengo. estoy indignado".

Los abogados sufren esta situación a diario. Hay jornadas en los que les suspenden todos los juicios y señalamientos. Muchos entienden la reivindicación de los letrados pero exigen que, al menos, les avisen con antelación. En la Ciudad de la Justicia de Barcelona una abogada explica que muchos de sus clientes se desplazan desde otras ciudades e ir a un juicio les supone una pérdida de tiempo y dinero.

Lo mismo ocurre con peritos o con los testigos, sin olvidar el coste para los propios abogados: "No solo hemos perdido el tiempo, sino también el dinero porque, evidentemente, no podemos facturar". El los juzgados de Valencia nos encontramos a Bianca. lleva en brazos a sus hija de tres semanas. Tenía cita previa para inscribirla en el registro pero no ha podido hacerlo.

Le han dado una nueva cita pero al ser una huelga indefinida no tiene claro que la vayan a atender: "El bebé tiene tres semanas, movilizarnos para nada es un inconveniente". Son algunos de los casos que deberán ser pospuestos. Las consecuencias se verán en el futuro cuando decenas de miles de procedimientos atrasados se sumen a la inmensa lista de espera de una Justicia ya de por si desbordada.

El Gobierno confirma que habrá una nueva licitación de Muface antes de que acabe el año