Las emisiones mundiales de CO2 crecen y vuelven a marcar un récord preocupante: según la Organización Metereológica Mundial, el dióxido de carbono procedente de los combustibles y la industria aumentó un 2,7 por ciento este año. Unos datos preocupantes que se quieren suavizar con medidas como el fomento de la compra de coches eléctricos, coches eco, y también con ayudas a concesionarios para que se coloquen más putos de recarga.

En el último barómetro del CIS se recogía que más del 80 por ciento de los españoles cree en el cambio climático y casi una cuarta parte, el 23,2 por ciento, sustituiría los coches de gasolina o diésel por vehículos eléctricos o híbridos para atajar sus efectos.

Estos datos se desprenden del último barómetro del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS), que además de las preguntas habituales sobre la situación política o económica, ha publicado cuestiones relacionadas de forma específica con el medio ambiente.

Un 62,7 por ciento de los ciudadanos españoles que creen en el cambio climático asegura que en estos momentos aún se puede parar y dar marcha atrás (cambio climático), frente a un 21 por ciento que considera que es una situación irreversible.

A nivel global, el 62 por ciento de los encuestados opina que para paliar el calentamiento se debería reducir las emisiones de gases contaminantes de la industria, y un 42,5 por ciento estaría a favor de usar y potenciar las energías renovables como, por ejemplo, la instalación de paneles solares en los edificios.

El barómetro destaca también que las personas de entre 25 y 34 años son las que más están convencidas de que nos encontramos ante un cambio climático, que explica los fenómenos meteorológicos de los últimos años.