España atraviesa una difícil situación económica por la crisis del coronavirus. Además de la histórica caída de la bolsa de Madrid, con pérdidas de más de un 20%, patronal y sindicatos negocian la ejecución de un gran número de ERTES, despidos temporales ante esta situación. Algunas de las más afectadas son las líneas aéreas y las cadenas de hoteles. Grandes empresas como Air Europa o Meliá ya preparan también estas medidas.
El turismo es quien más está sufriendo esta crisis por el brote de coronavirus, pero las consecuencias se expanden ya por todos los sectores. Empresas de automóviles ya han anunciado el cierre de sus cadenas de montaje. Europa ya habla de una recesión inminente. El mundo entero va a sufrir unas consecuencias impredecibles a día de hoy.
Casi toda la actividad está parada y las ayudas anunciadas no van a impedir el impacto del coronavirus que ya mismo está teniendo esta crisis sobre el mercado de trabajo. Una cantidad creciente de pequeñas empresas se ven abocadas a regulaciones de empleo, no prestan sus servicios o dejan de vender sus productos y tienen que prescindir de sus trabajadores.
La mayor empresa de alquiler de coches eléctricos, ubicada cerca del aeropuerto Adolfo Suárez, también ha sufrido los efectos de la crisis derivada del covid-19. El número de entregas diarias de coches ha pasado de 500 a estar por debajo de las 80. Tras el ERTE al que se han visto obligados, han tenido que despedir temporalmente a más de la mitad de la plantilla de la empresa.
Las agencias de publicidad también se han podido ver vacías estos últimos días. Se cancelan eventos, se retrasan campañas y se anulan proyectos en unas empresas en las que ya han puesto en marcha el trabajo desde casa como medida de seguridad ante la propagación del coronavirus.
