Kellys

Las kellys tardan un 40 por ciento menos en limpiar una habitación con la ayuda de robots

Un proyecto piloto en hoteles de Benidorm consigue reducir los tiempos de trabajo y mejorar las condiciones laborales de las limpiadoras con la ayuda de 'cobots', los robots colaborativos.

Cómo limpiar colchón

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La robótica ya es más que una realidad en la industria de nuestro tejido empresarial y ahora comienza a serlo en los sectores tan "humanos" como la hostelería. Los primeros ensayos con robots especializados en este sector han tenido lugar en Benidorm y han demostrado la funcionalidad de estos dispositivos autónomos.

Este programa desarrollado por el Instituto Tecnológico Hotelero (ITH) junto con IntecRobots y Robottions se ha puesto en marcha en la cadena Magic Costa Blanca y muestra la efectividad de estos robots colaborativos o 'cabots' para realizar tareas cotidianas de limpieza o de atención a huéspedes, con resultados tan llamativos como reducir en un 40% el tiempo de limpieza de una habitación.

Este ensayo que ha durado más de 9 meses "muestra resultados más que prometedores" según ITH. Y es que los 'cabots' han trabajado un promedio de 500 horas al mes, lo que ha resultado en un aumento del 700% en la asistencia a huéspedes y empleados, y una reducción del 15% en los costes operativos. Además, han realizado más de 40.000 tareas, recorriendo un promedio de 120 kilómetros al mes. Todo esto ha permitido que personal hotelero mejore su bienestar laboral y haya reducido los costes relacionados con la rotación de empleados, según un comunicado emitido por este instituto hotelero.

Fomenta el bienestar de los empleados

Según Mauro García, director del hotel de Magic Natura de Benidorm, (establecimiento participante), mejora "áreas cooperativas críticas y complejas" fomenta el bienestar de los empleados así como "moderniza la experiencia del cliente". Además, asegura que reduce las tareas "más penosas y difíciles y permite centrarse a limpiadores y camareros, en las que tienen más valor".

Tras el éxito de las pruebas, García revela que pretenden implantar otros dispositivos robotizados como carritos eléctricos y barras automatizadas.

Todo esto "como herramienta de apoyo para nuestros trabajadores y en ningún momento como sustitutivo", declara el director y asegura que el feedback de los empleados es muy positivo ya que reconocen "que pueden hacer su trabajo de una manera más cómoda".

Las reclamaciones de las kellys

Hace unos meses, la vicepresidenta de 'Unión Kellys Tenerife', María Noel Navas, advertía de que las camareras de piso trabajan con plantillas reducidas y sufren un desgaste físico y mental que las obliga a automedicarse. Aseguraba en un comunicado que es normal que una camarera "se tome dos ibuprofenos por día, además de ansiolíticos y otros medicamentos". Se quejaban además de que las bajas laborales no se cubren, lo que provoca que se tensione la situación.

Las camareras también piden que la edad de jubilación para su colectivo baje a los 58 años porque el porcentaje de camareras de piso que consigue llegar a la jubilación es ínfimo, debido a los problemas de salud que arrastran por las condiciones de su trabajo.

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El alquiler ahoga a los jóvenes y les obliga a volver a vivir a casa de sus padres

Los jóvenes españoles se van de casa a los 30 años, una edad más tardía que la media europea

Irse de casa en España se ha convertido en una carrera de fondo. Mientras en la mayoría de países europeos los jóvenes logran emanciparse a los 26, aquí la media roza los 30. Sueldos bajos, alquileres disparados y falta de estabilidad laboral dibujan un panorama en el que dejar el hogar familiar es casi una misión imposible.

Imagen de una terraza.

Los menús del día son más caros: Cuestan 14 euros de media, un 6,1% más que en el año anterior

El clásico menú de primero, segundo y postre ya roza los 14 euros. También se encarece la cerveza (2,4 euros), los refrescos (2,30 euros) o el café que como media cuesta 1,43 euros. La subida en la cesta de la compra afecta a todos, también a los hosteleros.